Había una vez un pueblito que quiso ser independiente... y no hablo de quienes ustedes piensan. Ya bastante guineo tenemos con ellos en televisiones y periódicos. No, lo que yo quiero contarles hoy, ocurrió hace mucho, mucho tiempo y no en una galaxia muy lejana. Para no andarnos con rodeos, fue en 1925 y en un pueblito, más bien un pago, de Los Llanos de Aridane en la isla de La Palma: Tazacorte.
El porqué a este pueblo le dio en ese momento por desear la independencia, no ya de Los Llanos, no ya de la isla de La Palma, no ya del Archipiélago Canario, sino de España entera, yo creo que habría que buscarlo en un hecho ocurrido unos 14 años antes. En 1911, Tazacorte era un pueblito pesquero con 2500 habitantes y, ya entonces, lo que más querían estos, sobre todo los progresistas, era no tener que depender de Los Llanos, que desde lo alto los miraba paternalista (en la imagen, puede verse). El caso es que, según cuenta el periódico "El Apurón", solicitaron al gobierno de la nación, con el correspondiente papeleo y la intercesión de Pedro Pérez Díaz, líder republicano y abogado del Consejo de Estado, que les concedieran el privilegio de ser ciudad y ¡se lo concedieron! El edicto del rey Alfonso XIII decía así: "Queriendo dar una prueba de mi Real aprecio al pueblo de Tazacorte, provincia de Canarias, por el desarrollo de su agricultura, industria y comercio, y su constante adhesión a la Monarquía Constitucional. Vengo a concederle el título de Ciudad. Dado en palacio el 23 de marzo de 1911. Alfonso"
¡Para qué fue aquello! Los palmeros no se cortan un pelo a la hora de hacer una buena celebración y esta lo fue ¡Nada menos que ser una ciudad! ¡Igual que Santa Cruz de La Palma, igual que Madrid, igual que Nueva York! Cohetes voladores, manifestaciones con bandas de música, banderas, gritos de euforia y cánticos hasta altas horas de la madrugada... ¡Una juerga monumental de varios días, vaya, que hasta el guardia tuvo que ir a pedir que se cortaran un poco, que había gente durmiendo!
Pero no a todo el mundo le gustó la decisión. El diputado conservador por La Palma en Madrid empezó a dar la lata allí poniendo a los de Tazacorte a caer de un burro: que si eran un barrio de barqueros salvajes y peleones, que si eran anticlericales y antimonárquicos, que si daban gritos subversivos... Y tanto manejó amistades y tanto susurró maquiavélicos comentarios en oídos compinches que consiguió que el gobierno diera marcha atrás, poniendo como excusa que se habían equivocado de nombre y que a quien habían querido nombrar ciudad era a Tacoronte en Tenerife. Tacoronte, sin comerlo, ni beberlo, ni haberlo solicitado, se vio convertida en ciudad ¿Se imaginan, después de las celebraciones, el desinfle, la afrenta y la indignación de los bagañetes (así llaman a los tazacorteros)?
Esa rabia tiene que haberles durado unos cuantos años más, en los que cualquier minucia se sumaba a la malquerencia de España. Y en 1925 dijeron que hasta aquí llegamos y ¡hala! se declararon unilateralmente independientes de España. "Con bicheros, palos y cañas / gritamos con voz de calibre: / ¡Viva Tazacorte libre / e independiente de España!" cantaban por las calles, mientras con escopetas de caza guardaban las "fronteras" y no dejaban entrar a ninguno de los "extranjeros" palmeros que los rodeaban. La independencia les duró 3 días. Al tercero, las autoridades, que no se andaban con muchos miramientos, aparecieron en la costa en forma de buque de guerra y ni cortos ni perezosos les mandaron un obús que, pasando limpiamente sobre el pueblo, fue a dar a la montaña de Argual (obuses tenían pero lo que es puntería, poca). Los de Argual eran extranjeros, claro, pero hasta hace 3 días eran sus vecinos y parientes. No les quedó más remedio que rendirse, abrir fronteras y proclamarse otra vez españoles. La buena noticia fue que ese mismo año les dejaron independizarse de Los Llanos y desde entonces Tazacorte es un municipio (que era lo que siempre quiso ser desde el principio).
En esta historia curiosa que todos los palmeros conocen (gracias, Enrique y José Vicente, por contármela) hay mucho material de reflexión: las pasiones por las que luchamos, las puñaladas traperas que se dan en política, las prioridades, lo malas que son las decisiones unilaterales, lo disparatada que es la naturaleza humana... Errores y aciertos forman parte de la historia de los pueblos. También de este, cuyas gentes hablan de ellos con humor en las parodias que representan en las fiestas de San Miguel. Hoy los de Tazacorte siguen siendo luchadores, apasionados y avanzados en todo (no por nada en La Palma a su pueblo se le llama "el París chiquito"). Y en estos tiempos que corren, más de uno habrá que recuerde, sentado tranquilamente en la Avenida, la gesta de hace un siglo, mientras se come un pescado fresquísimo frente a ese mismo océano, ancho y sereno, desde el que una vez les disparaban obuses con mala puntería.
Qué gran historia nos cuentas hoy, Isabel. De esas que a los historiadores (y ojalá a todos lo que no lo son) nos hacen reflexionar sobre fronteras, economía y política. Me encanta que hayas recuperado este episodio de Tazacorte, mil gracias por compartir. Un beso.
ResponderEliminarLa historia es más compleja, claro. Habría que tener en cuenta, por ejemplo, que la economía prosperaba en el pueblo debido a la expansión del plátano por sus terrenos de regadío y al incremento del tráfico comercial que se efectuaba por el desembarcadero de El Puerto. Había muchos intereses económicos pesando en que se independizara o no de Los Llanos. Y luego la cosa se complicó (como suele pasar). Así somos los humanos...
EliminarA veces, Mónica, ante hechos así uno piensa si lo que verdaderamente nos gusta a todos es precisamente algo así como esa comida frente al mar saboreando un pescado asado, recién salido del agua, con sus papas arrugadas y su vino del país.
Cuando vuelvas otra vez (con más tiempo, eh), te prometo ir con ustedes a La Palma y visitar Tazacorte, un pueblo precioso y tranquilo. Después de esa agitación barcelonesa, me da que lo disfrutarán.
Un beso.
Muy bueno.
ResponderEliminarSaludos.
Muchas gracias, Álvaro. Me pareció una historia curiosa sobre un tema del que ahora se habla mucho y que, por lo menos a mí, me lleva a reflexionar.
EliminarUn abrazo.
Buenos días Jane: por favor Jane ?por qué no envías este artículo a los "unos y a los otros" que tanto nos están aburriendo últimamente?. Aunque no se... igual sólo se fijan en el obús.
ResponderEliminarUn abrazo muy cariñoso.
Muy buen comentario, Rosa María. Me ha encantado lo de "igual solo se fijan en el obús", que es precisamente en lo que muchos conflictos de estos han terminado. Estoy leyendo un libro en donde se habla del conflicto de Irlanda del Norte y tengo en la cola "Patria" de Aramburu. Y me hacen pensar en lo que he dicho: las personas como tú y como yo creo que valoramos sobre todo la vida y nos aburre y repatea la torpeza de unos y de otros.
EliminarNo te preocupes con los comentarios repetidos. Ya borré los dos últimos, pero me quedo con los tres abrazos.
Ahí te mando otros tres.
Buenas tardes Jane: creo que te gustará "Patria", para mí ha sido una de las mejores novelas leídas últimamente. Por desgracia hay demasiada verdad en ella.
EliminarEstoy deseando empezarla, en cuanto termine 3 o 4 que tengo a la mitad. Me la dejó mi nuera a la que le encantó. El tema promete ser apasionante. Y tampoco está mal saber la verdad.
EliminarFue un error no darles la independencia deseada. Al fin y al cabo disponían de una huerta y de la pesca. Irían a otras islas a buscar carnes y otras necesidades como la ropa y aperos para la labranza, porque sus vecinos "de arriba" no les dejarían entrar por las fronteras que ellos mismos habían diseñado.
ResponderEliminarMis hijos, desde muy temprana edad, quisieron ser independientes -ya mayores de edad - y yo se los permití, pero ellos querían serlo viviendo en mi casa. ¡Ah, amigos, eso sí que no!
Es lo que hay en un mundo globalizado.
Una compañera de lecturas me había contado esta historia, pero tu relato es más completo, gracias.
Un abrazo y saludos.
Sí, Antonio, yo creo que muchos no han llegado a captar lo que el término "independencia" significa en su totalidad.
EliminarSi les hubieran dado esa independencia, también lo serían del resto de las islas y de las otras provincias de España, y sería una vida imposible. Ningún pueblo en este mundo interconectado (y menos en aquellos años) puede ser autárquico y bastarse a sí mismo. Me imagino el alivio que sintieron cuando al tercer día fueron otra vez parte del Estado. Y creo que fue muy inteligente el gobierno de Primo de Rivera al concederles el mismo año la independencia de Los Llanos y así restañar heridas de viejos agravios y contentarlos de alguna manera.
Un abrazo y gracias a ti.
Mi madre me contaba que decían: "Tazacorte libre independiente, queremos hijos pero no maridos".
ResponderEliminarAso sí era inteligente. ¡Ya lo creo!
EliminarJajaja, supongo que querrían decir que no se "casaban" con nadie. Las mujeres de Tazacorte tienen fama de ser valientes y guapas. El año pasado se les hizo un homenaje a algunas relacionadas con el mar bajo el título "Mujeres fuertes de salitre y oleaje".
EliminarY supongo que, como muchas de las mujeres de entonces, tuvieron que echar la casa adelante ellas solas cuando los maridos se iban a Cuba o al mar.
EliminarIsabel, ¡ muy buena esa historia que contaste sobre Tazacorte!
ResponderEliminarA mí también me lo pareció, Blanca (y apropiada para esta época que estamos viviendo). No la conocía pero me he dado cuenta que muchos tampoco.
EliminarUn testigo de todo fue el periódico "Tazacorte" (sí, ese pueblo pequeño tenía su periódico y todo, ya dije que siempre han sido avanzados). El periódico reconstruyó los momentos de sorpresa, abatimiento e indignación que sucedieron al conocimiento de la rectificación:
"¿Pero puede ser eso?, se decían mirándose de hito en hito los vecinos de Tazacorte. ¿No somos nosotros los que hemos solicitado esa concesión? ¿No ha sido el nombre de nuestro pueblo el escrito en la Gaceta? ¿No nos ha felicitado el Sr. Pérez Díaz, que es una persona de tanta respetabilidad y que ocupando tan alto puesto en la administración pública no podía sufrir engaño en cosa de este género?
Imaginad -proseguía el semanario- las llamaradas de indignación" que arrojaron "al cielo los pechos de aquel honrado vecindario al verse miserablemente engañado y despojado por el periódico oficial". "Ayer y aún hoy -decía el concejal adscrito al barrio- "ha cambiado de aspecto la cosa porque han circulado por allí telegramas desmintiendo la noticia" y "diciendo que el título de Ciudad se concedió a Tacoronte y no a Tazacorte; y ha cambiado de aspecto porque ahora se acentúan más los gritos contra los caciques y diciendo que "Mueran los traidores a la Patria" (refiriéndose a Tazacorte)".
Realmente un tema para una novela histórica! Muy interesante . Muchas gracias Isa por tu interesantísima información. Hace poco me leí la novela de Alexis Ravelo, Los Milagros Prohibidos y me encantó. Tema, la semana roja. Los perseguidos por falangistas y partidarios franquistas en La Palma durante la guerra civil española. Buena narrativa e interesante su temática.
EliminarHe leído muy buenas críticas de la novela de Alexis Ravelo y mi hija (que también ha leído mucho sobre la semana roja) me ha hablado muy bien de él. A ver si lo pongo en la lista de los "por leer". Yo leí hace un par de años un libro de Néstor Hernández López, "Crispiniano de Paz González" sobre los represaliados de Los Sauces. Llama la atención el retrato que hace de este pueblo (y de paso de La Palma) en los tiempos anteriores al 36, tan agitados y convulsos, sobre todo por problemas de riego. Tenemos la idea de que aquí en Canarias prácticamente no hubo guerra civil y, en cuanto se escarba un poco, se ven las tensiones, las puñaladas, las persecuciones... Ojalá nunca más.
EliminarLa de Néstor Hernández López sobre los represaliados en Los Sauces debe estar interesante. Lo tendré en cuenta y también lo añadiré a mi
EliminarLista . Un abrazo .
No es novela sino una obra sobre la historia de un farmacéutico de los Sauces, un hombre contradictorio pero valiente y muy comprometido. A mí me gustó.
EliminarBuen retazo de historia de nuevo, Isa. Me encantaban esas batallitas en boca de mi tía Matilde, que las proclamaba, aún altiva y creyéndose con más altura (y no solo geográfica) que los bagañetes, fruto de los pleitos propios de los pueblos cercanos.
ResponderEliminarCada lugar tiene su encanto, y cada uno, su playa, sus gentes y sus ricos manjares. No quiero ni acordarme ahora de los polos artesanos de turrón, incomparables mundialmente, y eso que no soy muy golosa, pero me quito el sombrero de copa, ja ja ja.
Los pueblos cercanos siempre rivalizan: Santa Cruz y La Laguna, La Orotava y El Puerto, Las Palmas y Santa Cruz... Hasta Realejo Alto y Realejo Bajo (cuando eran dos pueblos separados; ahora no hay diferencia).
EliminarY yo no quiero dejar de acordarme de los Príncipe Alberto de tu tía Matilde, la reina de los postres palmeros.
¿Te acuerdas del final de "Vacaciones en Roma"? Audrey Hepburn dice algo así como que cada ciudad es bella en su línea, pero que ella prefiere Roma por encima de todo. Podríamos decir lo mismo, cada sitio tiene su encanto pero cada uno de nosotros guarda uno especial en el corazón. Conozco muchos bagañetes para los cuales su pueblo es el mejor de todos.
Magnífico, Isa, el tratamiento que le das al hecho. Besos Carmen Nieves
ResponderEliminarViniendo de una especialista en Historia, Carmen Nieves, es un cumplido generoso y excesivo. Mil gracias y besos.
EliminarIsa, muy bueno. Y estaría bien enviarlo, como dice R.M.G., a los "unos y a los otros". Un abrazo.
ResponderEliminarMucho caso no le harían, Ursulita. Me da la sensación de que se ha instaurado un diálogo de sordos en los que nadie ha oído hablar de palabras como "diálogo", "entendimiento", racionalización", "cesión", "cordura"... O aprender de la historia.
EliminarUn abrazo.
Isa es digno de publicar en un diario nacional. Tan estrambótico como lo que sucede en la actualidad.
ResponderEliminar¿También a ti te lo parece, Mandi? Pensé que solo era apreciación mía.
EliminarHola Jane. Triste espectáculo el de las independencias porque creo que en el fondo lo que quieren es más dinero para "ellos". Siempre recuerdo que durante la dictadura, los ahorros de los canarios no se invertían en Canarias, sino que se llevaban a Madrid, País Vasco y Cataluña.(Lo mismo que tras la 2ª Guerra Mundial se inyectó mucho dinero a Japón y a Alemania) Casualidades, creo que no. Además no hace falta ser muy inteligente para saber porque lo hicieron.
ResponderEliminarPero claro, si no lloras no mamas.
Para vacunarse de los "independentistas" de todo signo, recomiendo oir la canción: "Milonga de un moro judío" (hay muchas versiones). Si la oyen, seguramente tendrán ganas de decirles como decía un señor mayor: "Vaiganse, pero lejos". Un beso Jane. Juan.
PD. De todas maneras no veo a Cataluña fuera de España. Se les acabaría el lamento y el enemigo. Por lo que los Pujol, Puigdemont, Más....no tendrían poder y eso no les interesa.
Otra cosa es que se les debería dar el derecho a un referémdum. pero esa es otra historia.
Pienso que el referéndum hubiera sido mejor mucho antes. Y no este remedo de referéndum, sin garantías, ni legalidad y con la mitad de los catalanes enfrentados a la otra mitad. Qué pena. Y mira, yo que no quería hablar de ellos... En el fondo, como dices, está el tema del dinero disfrazado de ideales.
EliminarHe estado oyendo la preciosa canción de Jorge Drexler, "Milonga de un moro judío": "No hay una piedra en el mundo / que valga lo que una vida..." ¡Cuánta razón tiene!
Un beso, Juan.
Tazacorte es un sitio fenomenal. Te lo dice un "bagañete consorte" ;)
ResponderEliminarPues no has tenido tú mal gusto, no. Según he oído de siempre, las chicas de Tazacorte son las más guapas, las más elegantes y las mejor vestidas de toda la isla. Casi, casi como las del Toscal (según decía Marichal)
EliminarUn beso.
El pequeño París, lo llamaban, Isabel.
EliminarSí, ya lo digo en el post, Claudia. El París chiquito.
EliminarAl leer tu post en el que citas a Pedro Pérez Díaz, me vino a la memoria un dicho de uso común al menos en la zona de Mazo, las Breñas y la "Suidad" y que tuvo como origen una campaña electoral de su hermano, Alonso Pérez Díaz, de quien toma el nombre el IES y la biblioteca del pueblo.
ResponderEliminarComo sabes tantas anécdotas de La Palma y creo que me dijiste que tenías ascendientes en Mazo, me imagino que conocerás el dicho "quedaste como Don Alonso" ¿no? Te daría para un post seguro.
Pues no lo sabía, nunca se lo oí a mi madre que era de Mazo; y ahora me quedo intrigada por no saber el resultado de dicha campaña electoral ¿Es quedar bien o quedar mal? Explícamelo.
EliminarDe hecho, la intercesión de Don Pedro en 1911 vino a raíz de unas conferencias que ambos hermanos dieron en la Sociedad Díaz Pimienta de Tazacorte (Díaz Pimienta, que nació en Tazacorte según se cree, fue antepasado mío), en su condición de líderes del republicanismo palmero. Ambos expresaron simpatía por los deseos progresistas de independizarse de Los Llanos y Don Pedro se involucró además en la petición. Él fue el que mandó el telegrama dando la enhorabuena al principio ¡Qué chasco!
Cuando José Vicente me envió por Whasapp la historia, no dudé en reenviarla a algunos contactos relacionados con La Palma, incluyéndote, porque sabía que tú le darías importancia e investigarías sobre el Suceso para darle forma con humor igual que en tus cuentos de Los Sauces.
ResponderEliminarViví en Santa Cruz de La Palma mis primeros diecisiete años de vida y siempre hasta hace muy poco me tomaba unos días de vacaciones para regresar a mi casa de nacimiento. Mi generación siempre consideró a Tazacorte un pueblo especial: avanzado, rico, moderno dentro del conservadurismo palmero y divertido. Cuando en los años 60 íbamos de excursión en guagua, existía un cierto entendimiento entre los bagañetes y nosotros que no encontrábamos en Los Llanos de Aridane. Siempre fueron destacados. Basta ver la corta historia de nuestra democracia, para comprobar lo diferentes que son al resto de palmeros: su consistorio fue gobernado largamente por el Partido Comunista o Izquierda Unida, después Icam (creo) y más tarde por Unión Bagañeta. Casi nada en el medio de una isla bastante conservadora.
La verdad que le diste la forma que yo esperaba a la historia. Mis felicitaciones.
No tenía yo la idea de la isla como muy conservadora. Seguramente porque he conocido a muchos palmeros que son lo contrario. Pero tú los conoces mejor.
EliminarLa idea de Tazacorte sí es la misma, un pueblo avanzado y divertido. Estuve viendo la programación de las fiestas de este año y, desde que empiezan hasta el Día de San Miguel y los Caballos Fufos, hay un mes ¡Fuerte pueblo novelero!
Me llamó también mucho la atención el que hubiera en aquellos tiempos un periódico reivindicativo y luchador social en el pueblo, el semanario "Tazacorte". Fue fundado por el maestro Esteban Beltrán en 1910 y ¡había una mujer impresora!, hecho rarísimo en una época de bordar detrás de la ventana. Solo tenía 4 páginas pero ¡qué poco bien aprovechadas!
Lo dicho: un pueblo especial.
Gracias, Enrique y un abrazo.
La moda entraba por ese París chiquito que nombras
ResponderEliminarPor la playa de Tazacorte entraron los castellanos en 1492 para iniciar la conquista de la isla. Algo de pórtico de entrada se le debe haber pegado porque mis amigas de por allí me han contado que allí se vieron los primeros bikinis, allí se pasearon las primeras minifaldas, allí se estaba al día en la última moda... No sé si ahora será así, pero el título lo tienen merecido :-D
EliminarMe ha recordado a Pasarporte para Pimlico. Supongo que es cierto el tópico de que la realidad supera a la ficción.
ResponderEliminarNo me acordaba de esa película (tenía yo 1 año cuando la estrenaron). A ver si la puedo volver a ver y la recuerdo mejor. Estoy por empezar una campaña de "Tegueste independiente" (ya se vería de quién).
EliminarMe acabas de dar una idea con lo de "Tegueste Independiente". Se la voy a proponer al Alcalde, al objeto de recaudar dinerito, que es lo que interesa.
EliminarCrearemos una aduana o simplemente un control de esos que hay en las autopistas de peaje colocado un poco más arriba de la gran rotonda, cerca de la Urbanización Tamarco subiendo. Los usuarios que quisieran circular por la carretera tendrían que acreditar de donde provienen, ya que los precios aumentarían para los hurones. En el caso de conflicto, saldría algún "estómago agradecido" de su escondrijo detrás de los árboles y amenazaría con el consiguiente "tú no sabes quién soy yo", suficiente para amedrentar a cualquier protestón. Mi temor es que si es conductora, el "puntal" cambiaría la frase por "paaasa, pasa, pero sólo esta vez, ¿eh?", con lo que ya estaríamos metidos en un problema de distinción de sexos, que está prohibido por ley. Pero todo se andará. Jaj, ja, jaaaa.
Pues muy buena idea, Enrique. Y además, visto lo visto, hasta unos matados como nosotros, igual nos llevábamos el gato al agua. Bastaría con apelar a los sentimientos (la patria teguestera, la tierra de nuestros ancestros y esas cosas) y luego quedarnos con dinero y recursos. Por mi lado haríamos otra aduana a la salida del Portezuelo (con lo cual todos los que van a las costillas de Casa Tomás tendrán que apoquinar también). De oro nos haríamos, Enrique.
EliminarMe gustó mucho el artículo, y sobre todo encontrar entre los comentaristas a viejos compañeros en la docencia como Adalberto, Carmen Nieves y Blanca.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Lalomir. Adalberto, Carmen Nieves, Blanca y muchos más son también colegas míos que me honran con su amistad y con el seguimiento a este blog. Te doy a ti también la bienvenida a este rincón.
EliminarUn abrazo.
Querida Jane, tienes una visión de "escritor" sobre las cosas. Deberías adentrarte en el mundo de la literatura. Si te aventuras me informas.
ResponderEliminarMucha suerte con tu blog. Una sorpresa.
Saludos
Muchísimas gracias, Francisco. Ya he escrito en este blog ("Si pudiera escribir..." el 22 de agosto de 2016, cuando ya había escrito 400 posts) las razones por las que nunca me voy a dedicar a la literatura. Si te apetece, busca el escrito de entonces.
EliminarPor ahora me contento, y mucho, con escribir cada semana sobre lo divino y lo humano y con encontrarme también con sorpresas inesperadas, como tu agradable comentario.
Un abrazo y espero encontrarte más veces por aquí.
Isa, qué bien escribes! Y qué bien me ha hecho leer la historia de los bagañetes... Un beso grande.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Lola. Viniendo de ti semejante cumplido el placer de recibirlo es doble.
EliminarA mí también me gustó la historia. Es para hacer pensar sobre cómo somos los humanos: apasionados, tercos, protestones... y, a veces, despistados en lo que verdaderamente importa.
Un besote grande.
Mi madre siempre me dicen que lo llamaban "el París chiquito" (cómo bien lo dices en tu escrito) porque llegaba todo lo nuevo antes que a cualquier sitio. ����
ResponderEliminar#cosasdePalmeros
Te repito lo que le contesté a Miguel Bravo hace 4 años: "Por la playa de Tazacorte entraron los castellanos en 1492 para iniciar la conquista de la isla. Algo de pórtico de entrada se le debe haber pegado porque mis amigas de por allí me han contado que allí se vieron los primeros bikinis, allí se pasearon las primeras minifaldas, allí se estaba al día en la última moda... No sé si ahora será así, pero el título lo tienen merecido :-D".
EliminarYp creo que llegaba todo lo nuevo por lo noveleros que son los bagañetes.
¡Qué historia tan divertida y, lo más importante, que nadie saliera dañado y que se recuerde como una gran anécdota como tú la has contado.Digna de una película del realismo italiano o de Bardem, o Berlanga...
ResponderEliminarA mí siempre me lo ha parecido, Elvira. Y si conociéramos la pequeña hstoria, la de lo que hacían y sentían los habitantes de Tazacorte en ese moemnto, podría resultar hasta un bestseller. Una historia muy bonita y recordada en La Palma.
EliminarQué entretenido, curioso y bien escrito está este post. Es de los mejores y la prueba es la cantidad de personas que te lo han alabado. No cabe duda de que una historia bien contada gusta y dan ganas de seguir conociendo otras para aprender más sobre nuestras islas, nuestro pequeño mundo que, al final, es la historia del mundo en miniatura. No hay nada nuevo, sino bien contado.
ResponderEliminar¡Gracias, Isa!
Muchas gracias por tus palabras, Milo. Conocer nuestra historia nos ayuda a conocer cómo somos y, aunque es verdad que no hay nada nuevo bajo el sol (intentos de independencia ha habido miles), siempre es bueno aprender de la experiencia ajena.
EliminarUn abrazo grandote.
Como siempre me encanta leerte, y esta vez lo he compartido, sé que no te importa y me dejas������
ResponderEliminarNo solo no me importa sino que me encanta que un escrito vuele, se comparta y se comente. Es el sentido que tiene tener un blog. Gracias, Rosa. Un beso.
EliminarMe caerán chuzos de punta, pero,...., lo mejor de Los Llanos se lo dio Tazacorte y Argual.
ResponderEliminarMira como lo sabes :-D
EliminarTengo amigos de los tres lados así que mejor me callo.
Tengo una gran amiga de Tazacorte y siempre me lo contaba
ResponderEliminarY además fue independiente..poco claro pero lo fue
Fue la gran gesta del pueblo, la que siempre permanecerá en el recuerdo de los bagañetes.
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