lunes, 16 de mayo de 2022

Viaje al pasado



Si la vida merece la pena es porque está salpicada de momentos gratos: una buena conversación, las risas con los nietos, la visión de algo muy bello, una música que embruja, la lectura de un buen libro, un beso de amor, el descanso después del trabajo... Y, por supuesto, las cenas con los amigos de siempre que hacemos todos los viernes por la noche desde hace unos 30 años.

El viernes pasado fue, además, especial. Fuimos al VIII Aniversario de la apertura del restaurante "La Bruma" en La Laguna, llevado, con muy buen hacer y esmero, por Suso Purriños y su mujer, Ligia. Suso, que fue alumno mío hace un montón de años, nos recibió tan cariñoso como siempre y nos ofreció un menú de esos que se paladean despacio y se recuerdan después: guacamole con chips de yuca, croquetas de huevo frito con chorizo, curry verde thai con chocos y gambones, carrilleras de ibéricos... Un menú riquísimo, pero también una noche increíble porque fue casi como un viaje al pasado.

Primero, me encontré con Quico, el hermano de Suso, que fue uno de mis primeros alumnos cuando, a los 23, di clase durante 2 años en el Colegio Luther King. Y allí pegamos la hebra a hablar de cuando al mes de inaugurarse el colegio (hace nada menos que 50 años), ni cortos ni perezosos, nos fuimos todos de noveleros, profesores y alumnos, a ver el Teneguía a La Palma; de los compañeros, con los que él todavía se ve, y de los que ya no están, como Pili o como Chano del que recordamos su humor y su risa; de cómo nos marcó el colegio, de lo bien que recordamos todo, en mi caso tal vez por ser el estreno. ¡Éramos tan jóvenes y teníamos tanto entusiasmo!

Después Suso trajo a mi mesa a tres de sus amigos de Instituto, Javier, Elena y Gonzalo, a los que, ¡qué casualidad!, también di clase de Filosofía en el 79-80 en mi segundo centro, el Instituto Andrés Bello, en el que estuve 13 años. Y me contaron que Javier y Elena se habían hecho novios entonces y se habían casado y ya tenían hasta una nieta; y hablamos también de aquellos tiempos, y de los profes, compañeros míos, que recordaban.

Al final, para seguir viajando al pasado, resultó que también allí había alumnos de mi tercer centro de trabajo, el Instituto Canarias Cabrera Pinto en el que me jubilé después de 22 años: Raquel, alumna, organizadora de mis viajes y amiga, que estaba en otra mesa con su marido; y también el animador, Emilio Cedrés, con el que no me pude resistir a hacerme la foto que ven al inicio. Era como ir de sorpresa en sorpresa ¡Había allí alumnos de los tres centros en los que trabajé! Nunca me había pasado, parecía como si el destino hubiera mandado una representación -bastante digna, por cierto- de cada momento importante de mi vida laboral.

La noche pasó entre risas, conversaciones y las canciones de Emilio, que tiene una voz preciosa pero que no pudo evitar que le acompañáramos a grito pelado en el "Y nos dieron las diez". Y cuando nos fuimos, ya cerca de las 2 de la mañana, entre besos y abrazos y deseos de volver a encontrarnos, no dejamos de decir, arropados por una luna llena en la noche lagunera, lo de "¡Pero qué bien nos lo hemos pasado!".


43 comentarios:

  1. Inés Parejo Sabina16 de mayo de 2022, 9:15

    ¡¡¡¡Precioso!!!!

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    1. Gracias, Inés. No sé si fue todo precioso, pero sí que fue una noche divertida en la que hubo sobre todo sonrisas.
      Un beso.

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    1. Muchísimas gracias, por lo menos fue escrito con el corazón.

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  3. NO SOLO FUE UN VIAJE AL PASADO PARA TÍ. En La Bruma pude comprobar lo que hace cincuentas años descubrí,a una persona guapa por fuera y más aún por dentro, Y sigue igual. Sí que es cierto que la vida es acumular recuerdos y tanto tú como Antonio forman parte importante de los que son hoy mi vida. Ojalá encuentros como el del viernes se repitan, porque son los que nos ayudan a seguir siendo felices. quicopurriños

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    1. Tienes razón, Quico, somos memoria. Y el colegio, y los primeros proyectos y el viaje a La Palma y nuestra boda (la celebramos en el colegio) y tú, y Miriam, y Antonieta, y Chano y tantos otros con los que dimos en ese momento forman parte de lo que somos y nunca los olvidaremos.
      Este fue un momento grato y especial. Por momentos así merece la pena vivir.

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    2. El artículo es precioso. Me encantó el contenido y me gustó lo bien escrito que está, la buena pluma, esa que los que aman escribir consiguen transmitir, que nos otra que los sentimientos a través de unas letras sobre el papel, como lo hace un buen intérprete al cantar una canción que la entona desde el corazón y nos hace sentir.

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    3. Gracias, Quico, tú sí que sabes transmitir, tanto con la pluma como con la voz. Gracias por todo.

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  4. Una alineación de estrellas y tú, la luna!!!

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    1. A lo mejor la Luna, a punto del eclipse total de ayer noche, estaba en su mejor momento, propiciando encuentros dichosos. Porque, además, estaba un compañero de Comunes al que no veía desde el 67 cuando me fui a estudiar la especialidad a Madrid. Ya te digo, una noche luna lunera cascabelera.

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  5. María del Pino Wood Wood16 de mayo de 2022, 16:00

    Emilio es todo un personaje!!!! Muy buen chico.

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    1. Tienes razón, es un chico estupendo, con un envidiable sentido del humor. Pero, además, me sorprendió como animador, lo bien que se le da. Canta muy bien, pero también se le veía en su salsa, cómodo y divertido, entre amigos.

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    2. María del Pino Wood Wood16 de mayo de 2022, 16:51

      Sí, se le ve mucho por La Laguna actuando junto con un compañero. También da clases en una escuela de música donde está mi nieta la mayor. Por tu escrito veo que disfrutaste de lo lindo. Qué bueno!!! Bss

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    3. Yo creo que está más feliz que si hubiera continuado con la idea de hacer Clásicas, que es lo que pensaba al salir del Instituto. Le encanta la música y se le da muy bien. Es un buen profesional de la guitarra. Y es verdad, disfrutamos de lo lindo.

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  6. Soledad Villalobos16 de mayo de 2022, 16:01

    Precioso relato Isabel. Felicidades . Un abrazo.

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    1. Muchas gracias, Sole, fue uno de esos momentos en los que se dan un montón de coincidencias, un momento para recordar.

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  7. Profe, ya te he dicho alguna vez, que de JOVEN quiero ser como tú. Abrazos!

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    1. Muchas gracias, Sara, tú sí que sabes animar al personal :-D
      Pero es verdad que veo en ti muchas de las cosas que yo valoro también: la honradez, el sentido de la amistad, la profesionalidad, el humor.
      Como decía Benedetti, "la clave es seguir siendo jóvenes hasta morir de viejos".
      Otro abrazo grandote para ti.

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  8. Ya imagino a Quico, que es el llorón de la familia , pañuelo en mano 😄.
    Sí que fue una noche emotiva

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    1. A mí en algún momento se me saltaron las lágrimas, no te creas. Había en mis tiempos jóvenes una serie de televisión sobre un pobre diablo sentimental, y mi madre me decía que yo era igualita a él.

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  9. Blanca Martín Torres16 de mayo de 2022, 16:45

    ¡ Qué divertido y precioso reencuentro!

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    1. Todos los reencuentros lo son, pero este fue especial por lo curioso, alumnos de mis tres centros reunidos allí, trayendo con ellos recuerdos y anécdotas de distintos años. Me gustó mucho.

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    2. Blanca Martín Torres16 de mayo de 2022, 16:56

      . Es curioso cómo se juntaron tantas casualidades! Entrañable Isa!

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    3. Ya te digo, en la vida me había pasado algo así. Flipé 😃

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  10. Una cena "viernesa" entrañable y disfrutada recordando tu vida profesional.

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    1. Pues sí. Y mira que las cenas viernesas, como las llamamos, siempre son agradables y disfrutonas. Pero esta tenía un plus. :-D

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  11. Eso es lo que pasa cuando la gente va por ahí sembrando cosas buenas. ¡Después no le caben los amigos en un restaurante!
    Un abrazo, querida Isabel

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    1. Jajaja, tampoco es eso. "La Bruma" es un restaurante pequeño, acogedor y coqueto. Por eso fue de lo más extraordinario que en tres de sus mesas hubiera gente con la que una vez, hace tiempo, hablé de Filosofía.
      Lo más parecido que me ha pasado fue en Budapest, una vez que descubrimos que en las 4 mesas del restaurante todo el mundo hablaba en español y en dos de ellas había gente que vivía en Tegueste.
      Casualidades estupendas de la vida.
      Un abrazo, mi querida Alicia.

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    2. Caramba!! Eso es difícil de superar 😄😂

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    3. Pues sí. Y más cuando le dijimos a la de la otra mesa que nosotros vivíamos en Tegueste y nos dijo que no porque ella no nos conocía. :-D

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  12. Me alegró mucho encontrarles allí. Buen ratito que pasamos, si señor. 😘

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    1. Y yo de verte a ti, Raquel, en un ambiente distendido (como cuando nos vamos de viaje) y no trabaja que te trabaja. Fue un rato de los buenos.

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  13. La verdad, Jane, que esos reencuentros con antiguis alumnos suelen ser emocionantes y muy emotivos. Te entiendo perfectamente. Y más, si se dan por triplicado y en un mismo espacio. Bonita e inolvidable cena viernesa, la que tuviste esta vez.

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    1. Tú lo sabes bien, Chari. Estos reencuentros nos ratifican, a los que tenemos vocación por la enseñanza, que elegimos la mejor profesión del mundo. Nunca me he arrepentido de haber elegido esta bendita profesión.

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  14. Bonito texto, Isabel. Encantado de “reconocerte”…¡como que estuve en el Andrés Bello también unos años y me sonaba tu cara¡ Aunque Filosofía me la impartió Marina y su inseparable trenza en el pelo…😊
    Un placer…

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    1. Soy Jorge, marido de Raquel, por cierto.

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    2. Muchas gracias, Jorge. También me alegro de "reconocerte" y también me sonaba tu cara. Marina fue una excelente compañera (también le di clase a su hijo en el Cabrera), muy creativa. Tuviste suerte.
      Gracias por lo de la otra noche, tú fuiste uno de los protagonistas formando dúo con Emilio. Fue una suerte para nosotros que hubiera gente allí tan entusiasta y dotada para la música. Contribuyó a que la noche fuera un éxito.
      Otro placer...

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    1. Pues sí, Elvira, algo de magia tenía la noche, con esa luna llena, el frío lagunero, la música sonando entre la bruma de San Benito (por algo se llamará así el restaurante, digo yo), y todas esas voces del pasado reconfortándome...

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  16. Anoche se unió el universo para ti Mary. Esos momentos son muy satisfactorios y llenan el alma. A Emilio lo conozco y es fantástico. Un beso Mary 😘

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    1. Sí, Pili, no se me borró la sonrisa de la cara en toda la noche. Y si ella es el espejo del alma...
      Emilio es un chico estupendo, nunca le vi una mala cara y ahora se le ve feliz. Me alegro que haya encontrado su camino.
      Un abrazo grande.

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  17. Menuda noche. Si se hubieran querido poner de acuerdo, probablemente no habrían encontrado una fecha en común. :)
    Un abrazo.

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  18. Francisco Guerra de Paz25 de mayo de 2022, 20:48

    Se nota que la gente te quiere. Muy entrañable el texto de una celebración, por partida doble, la de Suso por sus ocho años de labor culinaria empresarial y la tuya con esos encuentros de alumnos de todos los tiempos de docencia y amistad. Felicidades.

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