Si en algo somos genéticamente especialistas los humanos es en escaquearnos de nuestras responsabilidades. Hasta mi nieta pequeña -que no llega a los 2 años y en el hablar está empezando con los verbos-, después de tirar un vaso o una figurita al suelo y causar un estropicio, ya sabe decir, con su preciosa sonrisa, un encogimiento de hombros y las palmas de las manos hacia arriba: "¡Se cayó!".
Y es que el mayor invento a la hora de dominar este sublime arte es el dominio del "se" impersonal. Los periódicos están llenos de este "se": "Se aprueba el rescate", "Se produjo un tiroteo", "Se ha caído el sistema informático"... Una vez que íbamos a viajar a Santiago a las 10 de la noche, el avión no despegó hasta las 6 de la mañana porque "se ha producido un fallo técnico". Después nos enteramos de que el fallo técnico era que pilotos y azafatos estaban cansados y se fueron a dormir, dejando gentilmente que nosotros lo hiciéramos en las salas vacías del aeropuerto (ver amanecer desde los sillones incómodos de un aeropuerto, mientras las señoras de la limpieza friegan y vacían papeleras no es mi ideal de una noche placentera).
El truco está, como señala mi admirado Alex Grijelmo, en separar gramaticalmente todo lo posible a las personas de los fenómenos que ellas mismas provocan. Detrás de ese "se", parece que nadie tiene la culpa de nada. Son esos entes incorpóreos ("el sistema informático", "las razones operativas", "las fluctuaciones económicas", "la crisis"...) los que asumen todo el marrón, mientras los demás nos quedamos limpios, inocentes y angelicales. Incluso yo, que ya saben lo honrada que soy, ayer, que se me cayó un huevo de los que mi marido acababa de traer del mercadillo, antes de que me dijera "Pronto empezaste a hacer tortilla", ya le estaba yo diciendo: "Es que el huevo se puso resbaloso". Antes muerta que culpable.
Y no crean, cuando solo son dos personas las que viven en la casa, quedar absuelto es peliagudo. Hay que hacer virguerías para que nada nos salpique: "se rompió", "se traspapeló", "se perdió", "se esfumó"... Así, el padre de un amigo mío, cansado de tanto juego lingüístico y de tanto poltersgeist, le dijo a su mujer: "Mira, Catalina, déjate de rollos. Aquí solo vivimos los dos. O fuiste tú o fui yo".
Tal vez crezcamos moralmente cuando sustituyamos ese "se rompió" por "lo rompí" y llegue el momento en que todos aceptemos nuestros actos. Porque, si no, puede darse un caso como el de Guille, el hijo de unos amigos, que llegó a su casa por la noche y le preguntó a su madre:
- ¿Y las croquetas que sobraron del mediodía?
- Oh, se comieron.
- ¿Las unas a las otras?
¡¡¡Qué bueno!!! Totalmente de acuerdo. Yo pensé algo parecido el otro día en una reunión cuando decían "es que esto SE impone desde Valencia" (usando, además, Valencia como lo que tú llamas "ente incorpóreo"), y yo pensaba para mis adentros "¿y quiénes serán esos mandamás?".
ResponderEliminarAsí que...por aquí SE te da la razón Jane ;-)
Saludos
Ah, Chelo, y no te digo nada con el ente "Madrid". O "Europa". Tienen la culpa de todo lo que nos pasa aquí. Parece como si no existieran personas que han tomado decisiones, personas que se equivocan, personas que se olvidan de resolver asuntos, personas que meten la pata. La culpa al final la tiene la gramática, como decía el bueno de Nietzsche.
EliminarUn abrazo.
En el arte impersonal de escaquearse, tú eres la reina. ¿Qué es eso de que no? "Mira, Catalina..." ¿cuántas veces has dicho al aire: "Hay que hacer tal cosa" para que otro la haga? Ejem, ejem.
ResponderEliminarNo te digo que no. Efectivamente, aparte del "se" y de traer entes incorpòreos a los que cargarles con el muerto, toda ama de casa (y tú y yo lo somos a tiempo parcial) sabe que la única manera de repartir tareas sin que una parezca un sargento, es ir diciendo: "Este cuarto está muy desordenado. Habrá que ordenarlo", "Hay que podar los naranjos si quieren comer naranjas", "Hay que poner la mesa"... y cosas así. Incluso una puede decir graciosamente mirando al marido: "Es hora de cenar ¿no?", a ver si capta la indirecta.
EliminarHola Jane. Qué vamos a esperar de nosotros los humanos, si muchos de los que hacen solitarios se hacen trampas a ellos mismos. Claro que es más fácil echarle la culpa a los demás (véase a nuestros insignes representantes políticos). Te has fijado en que siempre la culpa es del otro? Y para colmo dicen que han hecho una renovación(?), será de sillones porque lo que es de personas....Pero hay que reconocer que tienen el campo abonado, somos especialista en escaquearnos. ¿Será que lo llevamos en nuestra carga genética?. Un beso Jane. Juan
ResponderEliminarEs verdad, Juan. Todos, menos nosotros, son culpables. Alex Grijelmo, el escritor que he nombrado en el post de hoy y que tantos artículos geniales ha escrito sobre el uso que hacemos del lenguaje, habla de los datos equivocados sobre el patrimonio de la infanta Cristina entregado por hacienda al Juez. Se dijo (otra vez el "se") que fueron causados por un fallo informático: "Del fallo informático pasamos a una equivocación "en la carga de datos", y luego resultó que todo se debía a "errores atribuibles al procedimiento", según la respuesta del ministro Cristóbal Montoro". O sea ¿de quién es la culpa? Del procedimiento. Estoy por adoptar el truco. Cada vez que me equivoque (y cuanto más vieja me haga, más me equivocaré), cuando me armen la bulla, diré: "Ah, se siente, la culpa es del procedimiento".
EliminarMe gustó lo de que nos hacemos trampas a nosotros mismos en los solitarios. Conozco a muchos que las hacen. Yo, no, pero porque hace mucho tiempo que no hago solitarios.
Un beso, Juan.
jajaja
ResponderEliminarTambién está el "me han suspendido el examen". Que a veces es verdad y otras no.
Yo siempre he oído "Aprobé" y "Me suspendieron". Tú eres el responsable único de los éxitos. Los demás y las demás circunstancias (los profesores, el poco tiempo, las preguntas que no estaban en el temario, el calor, el frío...) son los responsables de los fracasos. Es una manera de salvaguardar nuestra autoestima y alejar las frustraciones. Como método para ahorrarnos psicólogos no está mal.
EliminarMuy bueno tu articulo Isa, y es una verdad como un templo, cuando hay solamente dos personas en casa poco podria uno escaquearse.....pero cuando es una solita, no hay para donde agarrar......lo único ocultar la falta ja.ja.ja.Besos
EliminarSiempre encuentra una argumentos suficientes para no tener muy mala opinión de sí misma. Ya visto lo de mi huevo "resbaloso", por ejemplo.
EliminarMi marido, que es muy distraído conduciendo y siempre se confunde cogiendo carreteras que no son, siempre me echa la culpa a mí: "¡Es que me distraes cuando hablamos!". No sé qué excusa busca cuando se confunde al ir solo pero seguro que alguna encuentra. El caso es no salir mal parado ante nosotros mismos.
Besos.
Isa, me gustó tu "se". Me recordó otro impersonal que yo decía en casa cuando estábamos todos: "hay que sacar la basura", "hay que llenar la botella de agua"... Hasta que los niños me dijeron: "Mamá ¿qué impersonal es ese?"
ResponderEliminarClari, es la biblia lingüística de toda madre. Sin los "hay que", una casa como es debido no funcionaría. No hay impersonal más personal que esos. No le falta más que añadir "y no quiero señalar" ¿A que todos lo entendían?
EliminarEse impersonal lo usamos con frecuencia. Si mis hijas nos leen seguro que encuentran quien lo aplica. Pero como disculpa creo que es muy generalizado el uso. Los éxitos son míos, los fracasos de los demás. Siempre oyes que listo es el niño que entiende todo o que mal explica el profe que el niño suspende porque no lo entiende. Es así.
ResponderEliminarDebe ser que nos queremos mucho a nosotros mismos, Carmen. Siempre me acuerdo del hijo de unos amigos al que cada vez que le preguntaba por dónde iban en tal asignatura, me decía "todavía no lo hemos dado" (y eso a final de curso). Cuando suspendía lo veía muy injusto porque no habían dado nada de lo que le preguntaban en el examen. Ahora, cuando lo veo, nos reímos acordándonos.
EliminarPara mi escaquearme, es mandarme a mudar de un lugar donde no estoy a gusto. Una reunión pesada, una fiesta donde se ha bebido mucho, perdón, corrijo, hemos bebido mucho y algo más... Aprendí a escabullirme desde chiquito, antes de alcanzar alguna reprimenda o sopapo. Aprendí también, más mayor, a largarme a la francesa sin despedirme de nadie y menos del anfitrión. Vaya, sin que se note. Ese es el sentido que le doy al escaqueo. Igual estoy equivocado. Hay una frase que me gusta para lo que tu llamas escaquearse y es "hacerse el longui". ¿A qué se entiende?.
ResponderEliminarSegún el diccionario, Enrique, escaquearse es "eludir un trabajo, un compromiso, etc" (María Moliner), que es el sentido que le doy aquí. El Larousse recoge también la acepción figurada de "desaparecer", que es la apropiada a eso que haces tú.
EliminarA mí me gusta irme de los sitios antes de empezar a pasarlo mal (por eso me jubilé en un momento en que estaba disfrutando de mi trabajo). Pero eso sí, me despido de todo el mundo, faltaría más. Más bien, lo mío es a la española.
¡¡qué bueno!! como no tengo quien me escuche con los "hay que", me escaqueo diciéndome "tengo que"
ResponderEliminarAy, Ursulita, eres la persona menos "escaqueadora" que conozco ¡Si hasta que me tengo que enfadar contigo para que no te pongas a fregar platos cuando estás en mi casa! Es verdad, tú eres de las de "tengo que", así que a relajarse y a lanzar de vez en cuando unos cuantos "hay que".
EliminarEstupendo artículo Isa! la de la foto es tu nieta? en todo caso una niña preciosa
ResponderEliminarBesos
¡Nooooo! Mi nieta pequeña no llega a los dos años y la mayor va a cumplir 12. Esta foto está sacada de Imágenes de Google y respondía a lo que buscaba: una niña con cara de inocente diciendo algo así como "yo no fui". Esta niña -es verdad que es muy guapa y graciosa- debe estar entre mis dos nietas, 7 u 8 años le echo.
EliminarGracias por tus palabras. Un besote.
Creo que no salió mi comentario de antes, querida amiga canaria... igual de sublime y acertada que el resto de tus entradas... antes me explayé un poco más sobre que lo de "quitarse el muerto de encima" es como lo del típico comentario de "tu hijo ha hecho esto o aquello" cuando está mal hecho, que parece que el vástago no es de la pareja sino sólo del otro... o como cuando los defectos son heredados del otro progenitor como las virtudes, como no, son nuestras... esto da para otra entrada completita... un saludo desde Málaga donde últimamente el calor no da tregua.
ResponderEliminarIncluso he oído a un marido, quejándose de su madre, decirle a la mujer: "Mira lo que ha hecho TU suegra...". Siempre lo propio, estupendo, y lo ajeno, más de saldo :-D Debe ser que hacemos todo lo posible para no frustrarnos. Ya se sabe que el primer mandamiento es quererse a uno mismo. Y no creas, evita mucho problema mental.
EliminarUn saludo desde el norte de Tenerife, que está más fresquito que el sur y muchas gracias por tus ánimos.
Qué sabia eres. Y mejor dicho "Se es sabia", no espera "alguien es sabia".
ResponderEliminarBueno, hablando de sabios, ya lo dijo Gila "Alguien ha matado a alguieeeeeen".
Sí, Loque, el "alguien" es también muy socorrido "¿Por qué está este libro fuera de su sitio?". "No sé, alguien lo habrá puesto ahí". También le puedes echar la culpa de todo lo que está mal puesto a quien te venga a trabajar a tu casa: "Lo debe haber dejado Branson, que no sé dónde tiene la cabeza". Todo antes de decir: "Fui yo ¿qué pasa?".
EliminarMuy bien, Isa, ya es hora de apechugar con nuestras responsabilidades: Se quedó (como si las cosas decidieran pasar un ratito en casa ajena), se destiñó (mía culpa casi siempre) o la tan socorrida se dijo o se oyó, como si fuera una voz del más allá sin rostro pero con megáfono o parabólica. Como nos gusta deshacernos de implicaciones cuando no son exitosas....
ResponderEliminarCuando la participación implica buenos resultados ya nos encargamos de usar los pronombres personales, entonces sí levantamos la mano y sonreímos orgullosos.
Sí, Cande, muy buena la alusión a los "se dijo". Los rumores también tienen su origen en algunos "se" impersonales tras los que se esconden los que tiran la piedra y acaban con el buen nombre de algunas personas. Después empiezas a buscar de dónde vino tal calumnia o tal difamación, y nadie sabe nada: "se dice por ahí...", "se comenta...", "se oye...", "cuando el río suena...". No se puede hacer mucho contra eso aunque todos sabemos que detrás del "se" hay una o varias personas con nombres y apellidos.
EliminarY es verdad también que todos queremos arrimarnos al éxito: "El que a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija". Somos así, qué le vamos a hacer.
Qué bueno, me ha encantado.
ResponderEliminarY qué puntazo lo de las croquetas, mira que volverse caníbales...
Un beso.
Lo de las croquetas ha sido el mejor golpe de Guille. Cada vez que me acuerdo, echo la carcajada.
EliminarMuchas gracias. Otro beso.
Yo tuve una vez un gato... Blanqui... (Para mis adentros era "sería") Si desaparecía un cachito de queso blanco, de quesillo, un rosquete, un cacho de queque... o aparecía "pellizcado" yo soltaba un "sería" el gato!!! Eso sería un acto de arte escaqueante...!!! Muy felina yo de chica!!!
ResponderEliminar¡Ay, sí, que bueno es un gato o un perro o hasta una tortuga para cargar con las culpas! Tentada estoy de dejar a mi perro entrar en la casa para que el sea quien deja la mesa de trabajo desordenada o quien se olvida de apagar el cacharro del fuego.
EliminarMi hija pequeña tenía una amiga imaginaria para estas ocasiones. "Joaquinita" Cuando hacía alguna travesura había sido Joaquinita. Y Joaquinita se llevaba una buena reprimenda, con la esperanza de que alguien se la aplicara.
ResponderEliminarLas muñecas también sirven, Victoria. "Lola", la muñeca de mi nieta, de la que no se despega ni para comer o dormir, me da que va a cumplir ese papel en cuanto la niña empiece a calibrar las ventajas y desventajas de confesar los crímenes. Las Joaquinitas y las Lolas van a terminar diciendo lo que el cartel de la autopista hoy: "Ya no me sirven mis excusas"
EliminarMuy divertida
ResponderEliminarGracias por encontrarlo así, Araceli. Pero si te fijas, además es real como la vida misma :-D
EliminarJane, si mi marido te oyera!! Vamos, que le voy a pasar tu artículo para que lo lea. El tío es austriaco y cada vez que se me cae algo la tenemos, porque él me dice: "ya has tirado algo" y yo: "no, se me ha caído" y él: "claro, tú no lo has hecho, ha caído solo" y yo: "desde luego no lo he hecho adrede: se me ha caído!!" y él: "los españoles interpretáis todo cómo queréis, para eso tenéis el subjuntivo", y yo: "en alemán para cada mierda tenéis la palabra perfecta, por eso sois tan cuadriculados". Y así vamos...
ResponderEliminarUn abrazo
Seguro que en alemán también existen los "se" impersonal y los "hay que bajar la basura". Es una característica humana universalmente reconocida. Somos unos escaqueadores natos. Como dije, antes muertos que culpables.
EliminarLo de "no lo hice adrede" también es muy socorrido. Mis nietos mayores lo usan mucho. Tanto, que en reyes les regalé dos camisetas. Una decía "Yo no fui" y la otra, "Fue sin querer".
Un abrazo.
Jajaja. Claro que existe el "se" impersonal y el "hay que" , pero no lo utilizan con tanta alegría como nosotros.
ResponderEliminarUn abrazo
En algo nos teníamos que diferenciar :-D
Eliminar¡Qué fácil "se" lee lo que escribes! Me encanta.
ResponderEliminar¡Y qué a gusto "se" está alegando contigo! Gracias, Juancho.
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