Esto de
que febrero sea el mes de los enamorados y de que, por todas partes, veamos
anuncios de corazoncitos y lemas como que “el amor está en el aire” en la
publicidad de una agencia de viajes, hace que la cosa vaya calando entre todos.
Hasta en la clase de mi nieto, de 7 años, han hecho un concurso de
declaraciones de amor que el muy camelador ganó con unos versos que dicen: “Yo soy un barquito en medio del mar y tú
eres la estrella que me va a guiar”. Así que ahora, qué remedio, me veo yo
hoy escribiendo sobre el Amor, eso que dicen que mueve el mundo.
Además,
será casualidad pero este mes, en lugar de darme por leer novelas de crímenes u
otras zarandajas, ha caído en mis manos una novela que indaga sobre el Amor y
sus misterios, algo que no está mal para un mes tan efervescente. Se llama “El
verano sin hombres”, es de una autora norteamericana, Siri Hustvedt , y habla
de una pareja que lleva toda la vida junta, una pareja bien avenida, con
complicidades, que se quiere, vaya, y que él, de repente, le pide a ella una
Pausa. La Pausa
tiene 20 años menos y “unos pechos notables y auténticos, no operados”, nos
cuenta la protagonista, una mujer culta, una poeta premiada y todo, guapa todavía
a sus 50 años, que vuelve, desesperada y rabiosa a su pueblo natal donde
reflexiona, también con humor, sobre el desamor.
También
se cumplen, otra casualidad romanticona, los 200 años de “Orgullo y prejuicio”
de mi Jane Austen, novela que vi hace poco elegida por un jurado de editores y
escritores entre las 7 mejores novelas románticas de todos los tiempos. Y esto
es curioso porque “Orgullo y prejuicio”, más que hablar de amor, habla de
matrimonio, eso de que dos personas estén juntos de por vida, aguantándose
majaderías. Las parejas de “Orgullo y prejuicio” no se casan por amor: los
padres, por una atracción física que desaparece enseguida; la mejor amiga de
Elizabeth, como quien hace una oposición a un empleo fijo; la hermana menor,
por la novelería de un uniforme rojo en un cuerpo apuesto. Sólo Elizabeth y su
hermana mayor creen que es importante el amor para estar juntos. Pero eso sí,
el amor acompañado de dinero y posición. Probablemente ella no se hubiera
fijado en Darcy si él no hubiera sido el dueño de la mansión de Pemberley en
medio de una finca de 10
millas de largo entre bosques y arroyos caudalosos. Jane
Austen tenía, aparte de su vena irónica, un punto de cinismo que la hace muy
reconfortante.
Hace
poco, cuando celebrábamos mi marido y yo con una cena nuestro 41 aniversario de
boda, el cocinero, que nos había preparado una comilona digna de tal evento,
nos preguntó que cuál era el secreto para estar tanto tiempo juntos.
¿Cuál
es el secreto? ¿Será la química, esa oxitocina a la que llaman “la vacuna del
amor"? He oído a muchas parejas de mi edad decir: “Es que los jóvenes de hoy no
aguantan nada”. Pero muy triste será si el secreto está en el aguante. Unos
dicen que está en tolerar; otros, en compartir; otros en ser sinceros: “Mi táctica es ser franco y saber que sos
franca… para que entre los dos no haya telón ni abismos”, dice Benedetti.
Tal vez
el secreto de las relaciones largas esté en todo eso y en mantener viva esa
chispa primitiva que tantos poetas han cantado: Pino Ojeda que quisiera ser “el aire que te roza y te acaricia”;
Adrian Henry que define al Amor de 15 maneras entre las que está “El Amor es un club con dos socios nada más”;
Pablo Neruda, para el que, cuando ve
a la amada, “suenan todos los ríos de mi
cuerpo, sacuden el cielo las campanas y
un himno llena el mundo”; Quevedo, definiendo el Amor como que “es hielo abrasador, es fuego helado”; Bécquer
sin saber qué dar por un beso; Ángel González, un poco pegajoso, diciendole a
ella, “Alga quisiera ser, alga enredada, en lo más suave de tu pantorrilla”;
o Carlos Edmundo de Ory con “Te amo tanto
que a Dios telefoneo”.
“Esto es amor; quien lo probó lo sabe”, como diría Lope de Vega.
¿Hay secreto?
ResponderEliminarAh, no sé... Eso pregunto yo a ver si alguien lo sabe.
ResponderEliminarEn una canción de los millones que hablan del amor
ResponderEliminarAmor es el pan de la vida
amor es la copa divina
amor es un árbol sin nombre
qué obsesiona el hombre por una mujer
y yo estoy obsesionada contigo
y el mundo es testigo de mi frenesí
y por mas que se oponga el destino
serás para mi, para mi
A ver si un día de estos nos vemos, nos tomamos un termalgin y la cantamos.
Es verdad, Indeciso, que el amor es el tema estrella las canciones. Pero no sé por qué, hay también miles de canciones de desamor y olvido: "Sufro al pensar que el destino logró separarnos...", "Dicen que la distancia es el olvido...", "Pasaron desde aquel ayer ya tantos años, dejaron en su gris correr mil desengaños...", "Ahora que estás ausente mi canto en la noche te lleva...", "Sublime añoranza guarda el alma mía y trae la tristeza en mi soledad...", "No quiero que te vayas, la noche está muy fría...", "Quizás estés llorando al recordarme y estreches mi retrato con frenesí...", "Por eso me pregunto, al ver que me olvidaste, por qué no me enseñaste cómo se vive sin tiiiii...". Etc, etc, etc.
ResponderEliminarVete apuntando todas estas para cuando nos veamos a tomarnos ese termalgín. No cabe duda que las canciones de olvido son más desgarradoras aún que las de amor.
Ah, y no te olvides de "Ay, pena, penita, pena".
Quizá pueda ser querer a un compañero para la vida... tan simple y tan complejo... Besos miles
ResponderEliminarHola Jane. El Amor esa palabra por la que han habido guerras, suicidios, muertes,.... pero también canciones, poemas, actos heróicos....
ResponderEliminarseguramente es una palabra que cuando no has estado enamorado te resulta ñoña, pero que cuando lo estás es como si corriese por tu cuerpo un ejército de hormigas, llevando ansiedad, placer, a todo tu cuerpo.
Si ya sé que cuando se acaba es triste, pero que nos quiten lo "bailao". Un beso Jane.
PD. Felicidades por ese 41 aniversario.
Y yo creo que el secreto no existe, o tal vez sí.El-la que lo descubra que nos avise a todos, y así algunos se olvidarían de hacerle la puñeta a la gente.
El problema, Isabel Elvira, es que el compañero no te salga rana en lugar de príncipe azul. Muchos se han unido con alguien para huir de la soledad, o, en otros tiempos, de la pobreza, y luego comprobaron lo que la sabiduría popular ya sabía, que es mejor estar solo que mal acompañado. Eso sí, es una suerte encontrar, como dices, un buen compañero para la vida Acuérdate también de Benedetti: "Si te quiero es porque sos mi amor, mi cómplice y todo y en la calle codo a codo somos mucho más que dos".
ResponderEliminarBesos
Complicado tema querida Jane! Esta vez sí que has echado buena leña al fuego! jajaj ...pero lo enfocas al amor compartido, al de las parejas estables y cómo no al desamor...
ResponderEliminarQue el amor pasional (ese que no dura tanto como quisiéramos) es el mejor ¿quién lo duda? pero, y que decir de aquel amor imposible,... aquel amor secreto, ...aquel amor eterno...en definitiva, aquel "amor que duele" porque nunca vio salida... Ahí están, creo yo, las verdaderas historias de amor y si no, fíjate en las letras de aquellas canciones que, con acordes de guitarra, acompañaban antaño nuestras veladas: "si tu me dices ven".. "Si nos dejan" "...están clavadas dos cruces...". Por eso, querida Jane, el amor seguirá siendo un "misterio"...y no creo que ningun@ de tus bloguer@s hable de ese amor eterno, amor imposible, amor prohibido, si acaso lo ha vivido!
Besos, Mayuye
Ah, Mayuye, ese amor que dices es precisamente el que ha inspirado las mejores poesías, las mejores novelas, las mejores canciones y las mejores películas y obras de teatro. No hay más que pensar en "Romeo y Julieta" o en "Cumbres borrascosas", y en todas las canciones de las que precisamente hablaba a Indeciso más arriba (y que nosotros seguimos cantando ahora, nada de "antaño").
ResponderEliminarMe ha gustado tu comentario, añades un nuevo matiz a un tema tan eterno como este.
Un beso.
Juan, por el amor de una mujer, hasta los dioses han peleado. Y si no, que se lo pregunten a los troyanos... Y es verdad, no hay nada como estar enamorado, es como si descubrieras el misterio de la vida por primera vez. Me acuerdo de una alumna que una vez me preguntó si yo creía que el amor adolescente era verdadero amor. Pues claro, le respondí, el amor no tiene edad y cuando amamos lo hacemos con la misma pureza de la primera vez, incluso repitiendo los mismos errores. Leí que el escritor Alejandro Gándara decía que las penas de amor son como marearse en un barco: tú te sientes morir pero a los demás les da la risa cuando te ven. Y es que haces locuras, cursiladas, tonterías... pero, como dices, que nos quiten lo bailado. Quien lo probó lo sabe.
ResponderEliminarY a mis 41 años de tener un compañero en el amor, las penas y la vida hay que añadir los 6 de noviazgo. Ya somos casi familia.
Un beso.
En primer lugar, enhorabuena por esos 41 añitos de nada, y en segundo enhorabuena por haber dicho esta frase:
ResponderEliminar"Pero muy triste será si el secreto está en el aguante"
Que demuestra (una vez más) que eres sensata, moderna y generosa.
Y que qué gran final, el Fénix de los Ingenios siempre sabía qué decir!
Gracias, Loque, tú sí que eres generosa con los piropos.
ResponderEliminarLo del aguante, si lo piensas, es que es verdad. Para aguantar, mejor casarse con una grúa, que esa sí que aguanta. Pero estar con una persona ajena a ti que ni es familia ni nada aguantándola toda tu vida es de masoquistas.
Ana, cuando se casó su hermano, le hizo un poema que le leyó en la ceremonia. Decía así:
El matrimonio es pensar
al finalizar la vida:
"Fue un buena vida".
Es el mar en calma,
estar juntos en esa crisis,
en un cambio de empleo.
Es hacer el equipaje
y mudarse de casa,
compartir las alegrías
y las penas de los hijos,
llorar al lado del otro
la partida de quien quieres,
rezar juntos en la sala
de espera de un hospital,
apoyarse en el dolor,
abrazarse en navidad,
perdonar los errores
y envejecer juntos.
Es ese beso dormido,
el desayuno de siempre,
el trabajo y el cuidado
y es ese cuerpo a tu lado
cuando se apaga la luz.
Me gustó y pienso que es todo lo contrario al aguante.
Hola Isa:
ResponderEliminarPara mi el secreto es amar a tu pareja como a ti misma.
No lo he dicho yo, solo lo he aplicado en la segunda oportunidad.
Abrazos y mucho AMOR.
Ah felicidades por ese poeta nieto.
Otra jubilada
Gracias, Mari Carmen. Creo que sí, que al niño se le dan las palabras y las zalamerías también (como ves, se me cae la baba...)
ResponderEliminarEn el libro que nombro, "El verano sin hombres", la protagonista se pregunta por qué sigue queriendo a la misma persona y piensa que, cuando has querido mucho y mucho tiempo, se produce una comunión de ideas, gestos y recuerdos, como si la otra persona ya formara parte tanto de ti misma que hasta confundes el pasado. Tal vez sea por eso que dices, por haberla querido tanto como a ti misma.
Un abrazo y también te deseo Amor. Encontrarlo y disfrutar de él es una gran suerte en la vida.
Mari Carmen me ha mandado por correo una encuesta a niños de 4 a 10 años sobre qué es el amor. Transcribo algunas definiciones que creo que vienen bien a este post:
ResponderEliminar"Cuando mi abuela se enfermó de artritis, ella no se podía agachar para pintarse las uñas de los pies... Mi abuelo desde entonces pinta las uñas de ella aunque él también tiene artritis" (Rebeca, 8 años)
Amor es cuando una muchacha se coloca perfume y el muchacho se coloca loción para después de afeitarse, ellos salen juntos y se huelen" (Carlos, 5 años)
"Yo sé que mi hermana mayor me ama, porque ella me dio todas sus ropas viejas y tuvo que salir a comprar ropas nuevas" (Lorena, 4 años)
"Amor es como una viejita y un viejito que son muy amigos todavía, aunque se conocen hace mucho tiempo" (Tomás, 6 años)
"Amor es cuando la mamá ve al papá hediondo y de mal olor, y dice que él es más bonito que Brad Pitt" (Emilia, 8 años)
"Amor es cuando tú le dices a un chico que él está vistiendo una camisa linda y él se la pone todos los días" (Noelia, 7 años)
"Cuando tú amas a alguien, tus pestañas suben y bajan y pequeñas estrellitas salen de ti" (Karina, 7 años)
Sabios los niños ¿eh?
¡¡¡Qué poético, y amoroso, te ha quedado todo!!!
ResponderEliminarNo hay nada como darse de vez en cuando un baño romanticón. Te quedas más a gusto...
ResponderEliminar¡Quien sabe, debe de haber algo de magia también !! Acertado Mary ������
ResponderEliminarHace poco leí (en un artículo de Borja Vilaseca) que las parejas ideales deben compartir las cuatro C: La 1ª, Cama, la compatibilidad física pero que también tiene que ver con la química, a lo mejor esa magia de la que hablas: La 2ª C es Corazón, la compatibilidad emocional, el cariño, la ternura que dos personas se profesan. La 3ª es Cabeza, la compatibilidad intelectual, la complicidad y la amistad. La 4ª C es Consciencia, la compatibilidad espiritual, que tiene que ver con si nuestra pareja cree en nuestros sueños, nos apoya en nuestras aspiraciones y mira en la misma dirección.
EliminarPienso que estas teorías no son la verdad de la vida pero que es evidente que para que el amor funcione casi todos estos ingredientes son necesarios.
Y a lo mejor alguno más...