lunes, 11 de mayo de 2015

Un tesoro en una maleta




El padre de mi amiga Nieves, José Salguero, no se separaba nunca, en los continuos viajes que hacía, de una pequeña maleta en la que decía que guardaba un tesoro. El tesoro era motivo de bromas en la familia, y unos apostaban por las joyas de la corona, poco menos, y otros, por flejes de billetes bien colocaditos, como se ven en las películas. Cuando el padre de Nieves murió y abrieron la maleta, encontraron, sí, un tesoro inesperado: cuatro poemas inéditos y manuscritos de Ramón Perelló.


A la mayoría de nosotros no nos suena de nada el nombre de Ramón Perelló. Pero en la memoria colectiva permanecen los poemas que plasmó en canciones. Todos hemos oído (y algunos hasta cantado) el pasodoble más famoso: "Mi jaca galopa y corta el viento cuando pasa por El Puerto caminito de Jerez...". Yo me compré hace poco una película del año 36, "Morena clara", solo por oír a Imperio Argentina, sentada en una ventana, cantando desde la tristeza "Gitana que tú serás como la falsa monea, que de mano en mano va y ninguno se  la quea...". O animando a todo un patio andaluz con "Échale guindas al pavo que yo le echaré a la pava azúcar, canela y clavo...". "La bien pagá" (una de las coplas que más me gustan), las bulerías de "Los Piconeros", "Adiós a España", "Soy minero"... todas esas canciones archiconocidas fueron escritas por Ramón Perelló, un poeta muy cercano en el estilo a García Lorca y su "Romancero gitano", y a la generación del 27.

Ramón Perelló nació en Murcia en 1903. Era ya famoso cuando empezó la Guerra Civil. En ella sus ideas libertarias y anarquistas ("Ay, si la luna sintiera, la luna sería anarquista...") lo llevaron a defender en apasionados artículos la causa republicana ("... el poema es no solo arte, sino también arma, instrumento..."). Al final de la guerra, precisamente por pensar distinto, fue detenido y encarcelado durante 5 años.

Allí en la cárcel de Uclés, en Cuenca, conoce a José Salguero y se hace amigo suyo, una amistad en principio curiosa, porque José Salguero, con 29 años, era el Director de la cárcel. Ramón lo apodaba "Filigrana", porque era delgado, fino, elegante, con la gracia y el nervio de Jerez y un corazón en el que cabían todos. El primer poema que le regala lo retrata fielmente:

El segundo y el tercer poema son poemas de evasión: Ramón le propone a José una salida virtual de la cárcel, a la Cava madrileña en el segundo, y a una venta entre Sevilla y Jerez en el tercero. Ya no hay muros que los encierren, ya no son un preso y un carcelero, ya no hay una posguerra amarga y represora. Solo son dos amigos jóvenes que han olvidado las penurias para hacer lo que más les gusta: correrse una buena juerga, beberse unos vinos, oír un cante, hacer un repaso a todas las coplas. Y aunque en el segundo poema "está la tarde muy triste, está la tarde muy agria..." y se acusa el pesimismo de la prisión, al tercero -muy lorquiano y muy sensual- lo llama "Romance de la alegría" y se lo dedica a su amigo Joselito Salguero, "como anticipo de algo que mañana pueda ser para mí una grata realidad".


Solo en el cuarto poema asoma la amargura, la incertidumbre sobre el futuro, la hora amarga de la despedida, también dedicada a Oselito Salguero, "hombre bueno -el mejor entre los mejores-". La letra del poema ya no es tan cuidada y faltan algunos versos. Parece hecho a toda prisa, como si lo estuviera esperando a la puerta un destino incierto. Ramón va a ser trasladado al penal de Ocaña. Es en los principios del año 43.


Ramón Perelló salió al año siguiente de la cárcel. Paradójicamente, su vida no va a ser ni la de un represaliado ni la de un amargado. Triunfará en la España franquista (hasta que muere en el año 78), igual que lo hizo en la republicana. Y todavía hoy Almodóvar, Bebo Valdés, Carlos Cano, Diego el Cigala y mucha otra gente del cine y del teatro, han recurrido a las letras y a la música que él nos legó.

¿Y José Salguero, Filigrana? Fue destinado, como militar, a la isla de La Palma. Y allí un día vio en una ventana a una mujer palmera de la que se enamoró. Se casó con ella en el año 45 y tuvo dos hijas. Y, aunque murió joven, a los 52 años, siempre tuvo algo de aquel joven alegre y generoso que supo, a pesar de las circunstancias, inspirar a un poeta y que consideró su legado como el mayor de los tesoros. En el fondo de aquella maleta se guardaba la amistad.





(En la imagen inicial, una de las dedicatorias de Ramón a José. En la imagen final, la foto de los dos amigos: Ramón Perelló y José Salguero)

49 comentarios:

  1. Nieves M. Herrera Pérez11 de mayo de 2015, 19:11

    Pues sí que era un tesoro!!! Qué bonita historia!!!

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    1. Sí que lo es, Nieves. Los versos son preciosos. Ritmo, gracia, imágenes llenas de color, sensibilidad... Me gustaron mucho.

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  2. Hermoso relato de una maleta que guardaba amistad....y belleza. ¿Hay mayor tesoro?

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    1. Yo creo que no, Javier. Los billetes y las joyas te las pueden robar, pero nadie te puede quitar la complicidad que entraña una buena amistad ni el placer que puede proporcionar la belleza.
      Ahora le leí el último poema a mi marido y dice que se le puso un nudo en la garganta. Y no es para menos...
      Un abrazo.

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  3. Ana Salazar Bethencourt11 de mayo de 2015, 20:42

    No sabia nada de esta historia tan bonita

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    1. Es que esta historia está viendo la luz ahora, Ana. Mi amiga Nieves Salguero y su familia han guardado los poemas encontrados en la maleta de su padre durante muchos años. Y hace poco me pidió que yo contara la historia y sacara a la luz los versos. Helos aquí. Me siento honrada de que confiaran en mí.

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  4. Un gran tesoro: la amistad que tenían probablemente salvando muchas dificultades propias del momento.

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    1. ¿Qué será lo que hace que elijamos a unos amigos y no a otros? Ramón y José lo tenían en principio todo en contra: distintas ideas políticas (en un tiempo en que eso era fundamental) y distinto rango en la prisión. Y, sin embargo, coincidían en gustos y aficiones. Y también, por lo que me han contado, José era una persona extraordinaria, ocurrente, generosa y con una personalidad arrolladora.

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  5. Una historia enternecedora, una bella amistad y un hermosísimo tesoro.

    Está claro que la magia y el poder de la palabra no tiene límites ni en el tiempo ni en el espacio. Es el eco de un daemon, esa criatura divina que, contraviniendo las normas celestes, bajó a despertar nuestra conciencia con el fuego de la Poesía.

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    1. Mallarmé dijo que el poeta debía desaparecer del poema para "ceder la iniciativa a las palabras". En estos poemas, en cambio, está presente el poeta y su circunstancia (la cárcel, su amistad con José, su afición por lo flamenco...), pero también las palabras, que nombran el mundo que él sueña y lo iluminan: "La tarde tiene un perfí / de vinagre con horchata...", "Tarde pa meditasiones, / pa recuento de nostalgias, / pa recuerdos luminosos, / pa sementera de ansias...". El amor a las palabras, característico de todo poeta, despierta esa magia de la que hablas y que nosotros captamos a través de los años.
      Gracias por tu comentario.

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  6. Marilu Díaz Estrada11 de mayo de 2015, 22:51

    Bonita historia, que tiene su trasfondo, una maleta que guarda y sella una amistad, que el padre de Nieves cuida celosamente. Un gran tesoro.

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    1. Fíjate, Marilu, que en el último poema Ramón le dice a José: "Haz un hueco, un huequecito, / en tu "malisma" maleta, / y guarda en él el recuerdo / -y un abrazo como ofrenda- / de este amigo que te quiere / por levantino y poeta". ¡Y vaya si le hizo un hueco! No solo en la maleta, sino en su corazón y en su memoria. Nunca lo olvidó. Y eso, como dices, es un gran tesoro.

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  7. Qué bonito Isa. Me parece estupendo hacerlo público.
    Ignoraba el nombre del autor de esas coplas.

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    1. Me recordaste, Esperanza, los versos de Manuel Machado (al que, por cierto, Ramón Perelló conoció) que dicen:
      "Hasta que el pueblo las canta,
      las coplas, coplas no son
      y cuando las canta el pueblo
      ya nadie sabe el autor"
      Algo así pasó con Perelló, que por otra parte, después de la guerra triunfó en espectáculos musicales, en películas, en anuncios radiofónicos... Era en los años 60 uno de los 20 artistas españoles que más dinero ganaban en concepto de derechos de autor ("Mi jaca" en aquella época le reportaba 2 millones de pesetas en beneficios) y los discos con sus letras se vendían en todo el mundo. Así que supongo que sí era conocido dentro del mundillo coplero, pero no por los demás. Yo tampoco había oído hablar de él, por más que en las noches de cante con los amigos muchas veces cantamos "La falsa monea" o "La bien pagá".

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  8. Hola Jane. Una buena historia y que debería enseñarse en los colegios y en los parlamentos. Estamos cansados de ver el sectarismo entre los que tienen el poder (a la campaña electoral me remito). Ojalá hubiese muchas relaciones como ésta entre personas que tienen distinta "forma de pensar". Me recuerda la relación que ocurrió en mi pueblo hace muchos años durante la dictadura del golpista Franco: Entre un cura preconciliar y algún destacado represaliado republicano. Eran tiempos difíciles, pero la humanidad o la amistad logró echar abajo barreras y prejuicios.Un beso Jane. Juan.

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    1. Como Don Camilo y Pepone, Juan, los personajes de Giovanni Guareschi. Don Camilo, un cura robusto que habla con el Cristo del altar, y Pepone, el alcalde comunista del pueblo, dos personajes entrañables, que en el fondo se respetan, se quieren y acometen acciones conjuntas en pro del sentido común.
      Mucho sentido común me parece a mí que es lo que falta en nuestra política: menos insultos y más pactos; menos "y tú más" y más "vamos a ponernos a trabajar". A veces se olvidan de que lo que importa trasciende rencores o ideas opuestas.
      Buena idea la de que debería enseñarse en los colegios. Más de una historia parecida conté en mis tiempos...
      Un beso, Juan.

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  9. Que suerte tienes Nieves tener ese tesoro y una amiga que lo ha querido compartir ¡¡¡ Me ha llegado al alma,besos a las dos

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    1. Muchas gracias, Mandi. A mí también me llegó al alma: conocer la historia, sentir la emoción de Nieves al contármela, empaparme de esos versos escritos ya hace tanto tiempo, pero que siguen conmoviéndonos, ver a través de los ojos de los dos amigos aquella España rota y dividida... Tiene todo un trasfondo que hay que compartir y conocer.
      Un beso grande, mi amiga.

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  10. Acabo de leer lo que has escrito sobre "El tesoro del maletín". Cada vez que mi tío venía a Jerez leía los poemas del Manuscrito de Perelló hasta saber algunos de memoria.
    Me ha encantado todo lo que has dicho en ello y he revivido toda la historia.
    Te agradezco que sacaras todo esto a luz y te felicito por lo bien que lo has hecho. Me ha gustado mucho la alusión que haces a los temas que escribió, sus coplas. Yo las conozco todas ya que mi madre las cantaba y yo las aprendí de ellas.
    Un abrazo.
    Maruja Caballero, Jerez

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    1. Muchísimas gracias, Maruja, por tus palabras. Nievitas me ha hablado mucho de ustedes y para mí ha sido un honor que hayan confiado en mí. Es una historia preciosa y ustedes, que conocieron y quisieron a José Salguero, deben sentirse orgullosos de haber formado parte de su vida.
      Hay un poema de Hamlet Lima Quintana que empieza diciendo:
      "Hay gente que con solo decir una palabra
      enciende la ilusión y los rosales;
      que con solo sonreír entre los ojos
      nos invita a viajar por otras zonas,
      nos hace recorrer toda la magia..."
      No dudo que tu tío era de esas personas. Afortunados son los que sintieron su carisma.

      A mí también me encantan las coplas: cuentan historias completas, son desgarradoras y una se queda como una seda después de cantarlas. A ver si un día nos conocemos y nos cantamos una (o tres).
      Un abrazo, Maruja.

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  11. Qué historia tan bonita!!! y en la maleta, el tesoro más valioso que existe, la amistad. Los versos muy bonitos y entrañables. Has contado la historia maravillosamente, Un abrazo

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    1. No es tan fácil conseguir una verdadera amistad. Por eso es tan valiosa. Está hecha de vivencias compartidas y de reconocimiento como iguales. Le oí una vez a Elvira Lindo que los reconocemos por cómo respiran ante cualquier asunto.
      En esta historia, a pesar de las diferencias, probablemente se reconocieron como iguales y el tiempo que duró fue provechoso para los dos. Eso habrá hecho la cárcel menos penosa.
      Un abrazo.

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  12. El mejor tesoro. Una amistad guardada en su maleta. Su corazón. Una amistad probablemente, fortalecida con muchas dificultades para poder compartirla. Una historia muy bonita.

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    1. Sí que lo es, Carmen Delia. Y tienes razón, muchas veces paradójicamente las dificultades hacen más fuertes las amistades. Una amistad que, al menor contratiempo, se tambalea ni es amistad ni es nada. A mí me encanta que nosotras, después de dejar de vernos un tiempo largo, luego nos encontremos y como si hubiera sido ayer.
      Un abrazo grande.

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  13. Me ha gustado mucho la historia ISA, Nieves tienes que estar feliz por descubrir ese tesoro de la maleta

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    1. Me imagino, Clari, la cara de todos cuando abrieron la maleta en el año 65, cuando José Salguero murió. Y pienso que todos tuvieron que sentirse felices y orgullosos de un padre que consideraba la poesía y la amistad un verdadero tesoro.
      Un beso y gracias.

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  14. Precioso y emotivo post, Jane.
    En efecto, todos conocemos las canciones que nombras, pero yo personalmente. no sabía nada del autor ni de su vida,
    Y me ha interesado mucho.
    Gracias

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    1. Me alegro, Arista ¿Verdad que es una historia interesante? Yo tampoco había oído hablar en mi vida de él y, sin embargo, no hubo figura de la canción española que no incluyera canciones del maestro Perelló en su repertorio (escribió muchísimas, tiene unas 700 obras registradas).
      Durante la guerra se significó mucho porque fue director del periódico "Cartagena nueva", y escribía en los periódicos de tendencia comunista y libertaria ("Liberación", "Diario de Cuenca"...) O sea, que era un personaje público y conocido. Pero, cuando éramos (más) jóvenes, la verdad es que ni nos fijábamos en los directores de las películas ni en quien intervenía en ellas. Imagínate en un poeta que además es guionista y letrista de canciones...
      Me alegro haberlo resucitado del baúl de los recuerdos. Y haber traído también a un hombre bueno que eligió ser su amigo más allá de dimes, diretes y majaderías.
      Un abrazo.

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  15. Qué bonita historia y además real aunque parezca una copla andaluza... Qué sabio "Pepito" (como le llamaba con cariño su amigo) y qué interesantes sus dos vidas unidas por ese tesoro sin competencia de la AMISTAD. Como la sangre andaluza le hizo olvidar aquella fría e inhóspita Cuenca; los vinos, el cante y las risas que le daban tanta alegría. Nieves, me encanta cómo hace una descripción física de tu padre, y me encanta el poema de la despedida... "maravilloso".
    Gracias Nieves por tomar el testigo de tu padre y dar valor a este fuerte sentimiento que te permite compartirlo con nosotras poniéndolo en manos de ISA. Mi agradecimiento a las dos.

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    1. Es curioso porque lo llama de mil maneras (y eso salpica los poemas de cariño y cercanía): Joselito, Filigrana, Pepito, Josele, Osé, Oselito, José, Salguero...
      Y la descripción que hace de él está llena de adjetivos, que ya Nievitas nos dirá si son ciertos: presumido, pinturero, fino, ojos grandes, pelo "sortijao", garboso, mimbreño, perfil de banderillero, altivo, flamenco: "es una caña de vino / que se escapó del cañero". Por lo que se ve en la foto era muy guapo y tenía esa media sonrisa seductora. Lo que sí es verdad, y sus hijas y sobrinos cuentan, es que todo el mundo lo quería. Y eso también es algo para recordar.
      Gracias por tu comentario y tus palabras. Un abrazo grande.

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  16. Qué historia más entrañable y qué gran tesoro guardaba esa maleta. Cuando llegue a Tenerife leeré los poemas, porque aquí internet es muy flojo, de be ser el calor. Bs

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    1. Te van a gustar, Milo, y hasta me gustaría comentarlos contigo. Ya hablaremos cuando regreses. Besos.

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  17. ¡Hola Jane! No se si te gustan los premios, pero pásate por mi blog porque te he nominado a uno, ya que me parece que tu blog es distinto a todos en muchas cosas y me encanta leerte. Espero te guste.
    Te dejo mi enlace:
    http://cheloferrerblog.blogspot.com.es/
    Besos,
    Chelo

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    1. Muchísimas gracias, Chelo, por esa nominación. Me encanta de verdad.
      Me leeré bien despacio las condiciones y la entrevista, y a ver si me deslío este mes de junio y contesto con fundamento.
      Me ha venido bien que me mandes el enlace al blog para seguirte, que a veces me despisto (de paso me he leído unos cuantos post superinteresantes)
      Un abrazo.

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  18. Qué historia más bonita, pensar que se hicieran amigos siendo uno preso y el otro director de la cárcel, y que uno de ellos guardó sus poemas como tesoros toda la vida... es precioso.

    Casi más curioso es que el autor de "La bien pagá" fuera un ex-represaliado, que después volvió a ser libre y conoció el éxito masivo.

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    1. ¿Verdad que es una historia curiosa y preciosa? Así me lo pareció cuando me lo contó mi amiga. Le he pedido a todo el mundo que la difundan, porque creo que merece conocerse bien. Y los poemas son muy buenos (igual que las canciones, no me digas que esa "Bien pagá" no es desgarradora...)
      Creo que tuvo tanto éxito que fue uno de los autores mejor pagados en la España de los 60 y 70. Así son las cosas a veces...

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  19. Juancho Aguiar Clavijo17 de mayo de 2019, 18:51

    Precioso y emotivo. Gracias Isabel.

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    1. Gracias a ti por leerlo. Tú, que eres poeta, habrás reconocido la fuerza que la poesía tiene para hacer de puente. Entre dos almas, entre dos ideas.

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  20. ¡Qué historia tan maravillosa, Isabel! La bondad a veces se esconde en los lugares más extraños...

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    1. Sí, todo el mundo coincide en que José Salguero era un hombre bueno. Supo ver, más allá del cargo o de los odios de la guerra, al ser humano que tenía enfrente y supo quererlo. Es hasta una historia aleccionadora.

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  21. Rosaura Díaz Pérez17 de mayo de 2019, 19:00

    Una hermosa historia en la que surge la amistad entre el preso y su carcelero. Seguro que eran dos grandes personas.
    Enhorabuena por tus hermosos relatos.

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    1. Solo he sido la transcriptora, Rosaura. Esta historia la forjaron dos jóvenes llenos de sensibilidad, tolerancia y entusiasmo en una situación amarga; luego la guardó la familia y, más tarde, mi amiga Nieves me la contó para que yo la contara aquí. Me pareció, como dices, una hermosa historia que merece conocerse. Aparte de que los cuatro poemas que pongo en los enlaces (tuve que ponerlos así por lo largos que son) son inéditos, nunca publicados, y pertenecen a la familia de José Salguero, a Nieves y a su hermana. Ellas, tan generosas como su padre, querían que se conociesen.
      Gracias, Rosaura. Un abrazo.

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  22. Margarita Gallardo19 de mayo de 2019, 21:11

    Isa muchas gracias por descubrirnos al hombre y al poeta, felicita a Nives su padre guardó un gran tesoro los poemas y la amistad durante toda su vida. Ha sido un buen regalo dejarte depositaria para la difusión de una de las historias mas hermosas que he leído, forjada en un ámbito tan peculiar como una cárcel. Estoy segura que a muchos nos ha caído lágrimas. Joyas así no se leen a diario y con la calidad de tus letras has tocado nuestro corazón. Un abrazo.

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    1. Sí que me considero afortunada por la confianza que Nievitas y su familia pusieron en mí. Fue, como dices, un regalo. Pienso que historias así restablecen el equilibrio y nos hacen tener fe en la amistad y en la cooperación y en que el hombre en resumidas cuentas no es un lobo para el hombre.
      Muchas gracias por tus palabras. Un abrazo grande.

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  23. Gracias a Nieves e Isabel por compartir esta bonita historia❤️❤️

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    1. Y gracias a ti, Nuri, por leerla y sentirla.
      Un abrazo grande.

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  24. María Teresa Martín Martín19 de mayo de 2019, 21:17

    Entrañable historia, Isabel.

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    1. Sí que lo es, Tere. Esas salidas virtuales e imaginativas de la cárcel, esa chispa irónica que salpica todo el primer poema, ese salero... tiene el sello de lo entrañable.
      Un beso y gracias.

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    2. Preciosa historia de una maravillosa amistad, mi padre conoció a Don José y siempre me dijo que era un caballero, tenia incluso una foto con él en una corrida de toros aquí en Santa Cruz, un placer leerte amiga como siempre

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