lunes, 8 de octubre de 2018

Campanas de Vegueta


Plaza de Santa Ana y Catedral desde la azotea del Ayuntamiento (foto Carlos García)
En cada día, si se sabe mirar bien, hay momentos sorprendentes, como flashes que iluminan un camino incierto. Y si uno se aleja de su entorno habitual, esos flashes se multiplican con el aire de lo novedoso y lo distinto.

Este fin de semana he estado en Gran Canaria, una isla que no conozco bien a pesar de ser la más cercana. He hecho una visita cultural con unos cuantos amigos del grupo "Lo que las piedras cuentan (de los que ya les he hablado aquí y aquí) y he atesorado algunos de esos momentos,  que ahora comparto con ustedes.

El descubrimiento de los cuadros llenos de vida de Antonio Padrón explicados con pasión por el guía  y doctor en Bellas Artes, Javier Jiménez, un buen conocedor de su obra: la tierra, las figuras femeninas, la costumbres y mitos, la luz... Una maravilla.

La sorpresa, al final de una comida, de una canción cantada por un coro (luego supimos que era el Coro de Cámara "Ainur") que celebraban un cumpleaños en la mesa de al lado: voces altas, claras y cálidas entonando una bella composición en alemán que nos hipnotizó antes de darles el gran aplauso.

Los retazos de historia que nos brindaron: la reproducción de una vivienda aborigen en la "Cueva Pintada" de Gáldar, con sus camas empotradas en nichos amplios y cómodos y sus pieles para abrigarse en noches frías; o las gárgolas con forma de cañones que echaban agua y no bombas pero que igualmente asustaban a los piratas que pretendían conquistar la ciudad; o los bellos edificios clásicos y modernistas de Gáldar y del barrio de Vegueta en Las Palmas, que nos hablan de las grandes familias que un día fueron...

El paseo por la mañana temprano por la Playa de Las Canteras, envidia de todos los tinerfeños y gloria de la ciudad de Las Palmas. A esas horas ya estaba llena de vida y su arena dorada resplandecía. El mar estaba en paz y el aire limpio.

La visita a la Casa-Museo de Pérez Galdós con su mesa de estudio, sus páginas escritas y con tachones, sus plumas, sus libros y su extraño afilador de lápìces, que nos hicieron sentir afinidad con el viejo escritor. Y el timbre artesanal de la puerta, con sus esquilones, su larga cuerda y su música, nos hizo recordar costumbres pasadas.

La exquisita arquitectura del Castillo de la Luz, baluarte defensor, que se ha sabido reconstruir tan inteligentemente y en donde las esculturas de Martín Chirino (tan graves, tan aéreas) casan extrañamente a la perfección con los gruesos muros.

El feliz hallazgo, en una mesa aparte en el desayuno del Hotel, de exquisiteces del país: rodajas finas de queso de Fuerteventura, un bol de cristal con chorizo de Teror, frascos pequeños de mermelada de higos picos, suspiros de Moya, crujientes y deliciosos (me comí dos)...

El disfrute del humor canarión (siempre me ha gustado oírlos hablar, hasta cuando lo hacen en serio): las explicaciones de un taxista sobre sus desgracias al conducir por La Isleta; o un rato de chistes tomando un café en la Plaza de Santa Catalina; o las estatuas que salpican la ciudad (Lolita Plumas, la Loreto o el pescador, agachado y descamando el pescado), síntomas de un pueblo con buen sentido del humor y buen sentido común.

Los regalos generosos que nos han hecho: libros sobre Gran Canaria, sobre Galdós y sobre Chirino, una agenda de las que me gustan, con hojas blancas y tapas duras y bonitas, un llavero... Y lo mejor, la compañía de los miembros del grupo que viven allí y los guías de lujo que tuvimos en las visitas. Gracias a todos ellos.

Y sobre todo, la magia de un momento único. Cuando subimos por la tarde con el cronista oficial de la ciudad a la azotea del Ayuntamiento, las campanas de Vegueta se pusieron a repicar. Hasta a él lo sorprendieron ¿Tal vez era porque al día siguiente era la fiesta de la Virgen del Rosario o porque en esos momentos se estaban reuniendo grupos floklóricos de toda España (los vimos pasar después muy tiesos y engalanados)? ¿O era por nosotros, visitantes cercanos y familiares? Quisimos verlo como una bienvenida cariñosa de la ciudad, la celebración de que estábamos allí disfrutando y aprendiendo cómo nació y ha crecido Las Palmas, esta ciudad grande y cosmopolita, abierta al viento y al mar:
Barrio de Vegueta, 
barrio donde nací, 
Torre de la Audiencia
de San Agustín.
Las más alegres campanas
de nuestra Catedral,
donde la Plaza Santa Ana
al aire se echó a volar.
Al mar. al mar.
repican, repican al mar...
(canción de Los Sabandeños)

El grupo con los perros de bronce de la Plaza de Santa Ana. Foto de Carlos García.


Playa de Las Canteras por la mañana (Foto Charo Borges) 

Escultura de Martín Chirino en el Castillo de la Luz (Foto Charo Borges)

Despacho de Pérez Galdós

Cuadro marino de Antonio Padrón. En él, el rayo verde.


Balcón de casa modernista en Vegueta. 

44 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Lo que fue verdaderamente very well fue tenerte cerca para paliar mis biodraminadas. Y de paso se me quitó la fascitis plantar que venía arrastrando. No hay nada como tener un médico cerca. Very, very well.

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  2. Magnífico tu comentario de este viaje a Gran Canaria que hoy , en casa descansando, he vuelto a rememorar más si cabe, con tus descripciones tan detalladas.Gracias Isa.

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    1. Sí que llegamos cansados ¿verdad? Pero todo se va con una buena dormida en la camita de una. Y hoy toca repasar, comentar, rememorar... hacer el puzzle del viaje en el que lo que no recuerda uno lo recuerda el otro y hacer juntos con él un álbum de esos de guardar en la memoria. Y que se repita, que nos faltaron muchas cosas preciosas, como nos decía Macu.

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  3. Inmersos en la rutina es tan difícil para un momento y percibir esos flashes aunque nos estén cegando. Y aún así, a veces lo consigo y puedo hacer repaso de alguna cosa curiosa, o de una situación divertida o consigo darme cuenta de que lo que yo creía aburrido, también tiene su importancia. Eso es sobre lo que me ha hecho reflexionar tu escrito, Jane, más allá de que nos has narrado una excursión de lo más interesante.
    Un abrazo y feliz semana.

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    1. Sí, hay que fijarse, porque la verdad es que cada día tiene motivos para sorprender. Si no la vida pasa y no nos damos cuenta.
      Hoy mismo puede ser una llamada de una amiga o un buen plato que no esperábamos que saliera tan bueno o sentir el sol en la cara... O también saber que te he hecho reflexionar. Me alegro.
      Un gran abrazo.

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  4. Así se hace la Comunidad, tan cerca y a veces tan lejos. Yo soy una enamorada de Las Palmas. Será por los buenos recuerdos que tengo de mi infancia por allí. Y tú, que nos deleitas siempre y nos hace amar los lugares que visitas

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    1. Muchas gracias, Carmen. Para mí es una desconocida casi. Solo habré ido 7 u 8 veces, y no por mucho tiempo, pero cada vez que voy descubro maravillas. Es una ciudad preciosa y abierta, en la que por lo menos yo, me siento como en mi casa. Y una asignatura pendiente: el resto de la isla que casi no conozco. Con decirte que nunca he ido a las playas del sur... Un pecado imperdonable. Lo subsanaremos.

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  5. Las Palmas es la ciudad más rica y viva de Canarias. Espero volver pronto a ella. Me gusta esta perspectiva desde los tejados, entre liñas de ropa y palomares.
    https://youtu.be/GL0rbxB9Lqg

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    1. Entre que no monto en bicicleta y el vértigo que tengo, me dejaste con los pelos de punta con el vídeo. Pero me encantó esa perspectiva desde lo alto.
      Una cosa que me gustó mucho, cuando subimos a la azotea del Ayuntamiento, fueron las casas de colores del Risco. Pepe Monagas, el personaje de Pancho Guerra vivía allí, y muchos pintores las han llevado a sus cuadros. Las Palmas es verdaderamente una ciudad de contrates asombrosa.

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    2. De El Risco tuve un alumno rapero pero caradura de los pocos que he suspendido por ir de listo. Al año siguiente lo vi y me reconoció que se pasaba de listo. Lo bueno de callejear Las Palmas durante horas que que luego escuchas las historias del Pepe Monagas de José Castellano o los chistes de Manolo Vieira es que reconoces los sitios que nombran por haber estado allí. :-)
      En el sur me sorprendió un colegio, CIP, llamado Pepe Monagas. ;-)

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    3. "El diario de Pepe Monagas" de Pancho Guerra fue mi biblia durante el exilio madrileño. Lo he leído unas cuantas veces. Pepe Castellano hizo su personaje sobre él, pero el libro es mucho más profundo y tiene una riqueza de lenguaje impresionante: merece la pena leerlo (junto con "Los cuentos de Pepe Monagas"). Yo reconozco sitios de Las Palmas por esos libros. Si alguna vez estás tristón, mira a ver si lo consigues y te lo lees. Levanta el ánimo por su sentido del humor y su conocimiento de la naturaleza humana.

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    4. Hace años leí esos Cuentos de Pepe Monagas y me costaron más un libro en inglés, jeje, por los los vocablos usados y el lenguaje coloquial literal. El Cabildo de Gran Canaria editó las obras completas de Pancho Guerra que no son pocas. Siempre he pensado que la dimensión de los textos es mucho mayor de lo que parece y que ha sido denostado por su dimensión local.
      José Castellano, por lo visto, trabajaba en el edificio noble del ayuntamiento en el que estuviste en la azotea. Cuando descubrí el Callejón de la Vica me empecé a reír porque me acordé de este monólogo. Luego, pasaba por allí y me reía solo como un bobo, jeje. :-)
      https://youtu.be/HfGLIO-oABU

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    5. Jajajajaja, no me acordaba. Para la próxima visita, junto con el CAAM, el Jardín Botánico y el Museo de Néstor, hay que visitar el callejón de la Vica. ¡Qué bueno!
      Las obras que yo tengo son las del Cabildo de Gran Canaria. No sé si las han reeditado pero sería estupendo que lo hicieran.

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    6. Se han ido editando y hace un par de años salió el cuarto tomo de las obras completas. En medio, recuerdo varias ediciones.
      Me gusta pasear por barrios como San José y algún paseo por El Risco me he dado. Hay un bar, ahora lo llevan chinos, empezando en paseo de San José cerca de un instituto.
      https://goo.gl/maps/4K4tK5mYRXv

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    7. Pues otro paseo para la próxima vez. A ver si te apuntas...

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  6. Las Palmas la tengo en mi corazón, a pesar de ser lagunera. Allí vivieron mis abuelos, allí viven varias hermanas, allí he pasado muchísimos días felices... Gran Canaria, la gran desconocida para muchos canarios. Me alegro de que pasaran estos días tan agradables con nuestros queridos vecinos. Seguro que repiten! Besos, Isa.

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    1. Para mí es la gran desconocida como isla. Fui una vez hasta el Roque Bentayga y para de contar. No conozco pueblos como Arucas o Agüimes ni he ido a las Presas ni a otros sitios que me han dicho que son preciosos. Se tiene tan cerca que parece que siempre hay tiempo. Pero se impone un conocimiento más profundo ya en futuros viajes.
      Besos, Milo.

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  7. Rosa María Fuentes Herrera8 de octubre de 2018, 20:59

    Me encanta,lo comparto.

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    1. Gracias por hacerlo, Rosi. Y me alegro de haber compartido esta primera salida del grupo contigo. Lo pasamos estupendo ¿verdad? ¡A repetir!
      Un besote.

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    2. Rosa María Fuentes Herrera8 de octubre de 2018, 21:17

      Genial...anoche como los niños,rememorando todo ya en la cama, todo salió perfecto...

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    3. Eso pienso yo. No pudo salir mejor.
      Si vieras lo que me pasó... Tenía tantas imágenes en la cabeza que me levanté a las 3 y escribí el post a esa hora. después me quede como un tronco hasta las 10 de la mañana.

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  8. Yo fui por primera vez a Gran Canaria hace ya la friolera de 42 años. En el año 1966 y para jugar la fase final del campeonato canario de la 2ª División nacional, de baloncesto femenino. Después seguí yendo, por el mismo motivo, unos 10 años más, y cuando me retiré, a finales de los 70, anduve por allí unas cuantas veces más, por motivos familiares y profesionales.
    Siempre fueron estancias muy cortas y apenas tuve ocasión de conocer y recorrer, en Las Palmas, el barrio de Vegueta, Ciudad Jardín o el Parque de Santa Catalina. Lo que sí llegué a visitar y a conocer con bastante profundidad, siempre que iba, fue el Museo del pintor Néstor Fernández de la Torre. Sus Poemas del Mar y de la Tierra, me fascinaron desde la primera vez que los descubrí y nunca más me desenganché de su influjo.
    En esta oportunidad de oro, Jane, he tenido el placer de haber descubierto contigo y con el resto de compañeros de viaje la serie de joyas que tú tan bien evocas y describes, quedándome la pena de no haberme reencontrado con el Maestro Néstor y su monumental obra y de no haberme adentrado en una institución más reciente y actual y que en mi tiempo de visitas más frecuentes aún no existía: El CAAM, el Centro Atlántico de Arte Moderno. Hubieran sido las guindas del hermoso pastel que pudimos degustar en los dos intensos días que compartimos en la isla hermana.
    Espero que, más pronto que tarde, pueda cumplir este deseo y así acabar de disfrutar de esos lugares e instituciones modélicos que nuestros paisanos de "la isla de enfrente" han sabido fundar, valorar y mantener, para que todos los que las visiten pasemos ratos tan satisfactorios como los que hemos vivido en este último fin de semana.
    Me he sentido una testigo, muy afortunada, de todo lo que relatas en tu entrada y me encantaría volver a serlo, porque hayamos vuelto a esa ciudad, tan viva y tan cercana, para seguir conociéndola y disfrutándola.
    Gracias, Jane, por contribuir a que vuelva a saborearla.

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    1. Apuntaremos el CAAM, y el Museo de Néstor (yo lo vi hace años y es precioso), el Jardín Botánico, el Acuario... Estoy segura de que los organizadores ya tienen material para otro año y más. Joyas para hacer placentero cualquier viaje. Me apuntaré otra vez.Y tú conmigo.
      Otro momento estupendo fue el haber podido estar con Eli, la herreña-tienrfeña-canariona más generosa que hay. Me encantó verla.
      Gracias, Cehachebé.

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  9. !!!!Me gustó Isa!!! haces una crónica de Las Palmas muy instructiva. Enhorabuena

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    1. Gracias, Mandi. Y dentro de poco otro viajito, esta vez compartido contigo. Estamos de un novelero que no se puede aguantar. Que no decaiga.

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    2. A mí también me gusta esa playa al lado de la ciudad, el parque de Santa Catalina, Triana...En el 59 la conocí, camino del destino de mi padre, Tenerife. Siempre la recuerdo con cariño.

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    3. Además que el nombre de Triana, al otro lado de un río que ya hoy no existe, se le puso por esa Triana de tu Sevilla natal. Es un verdadero lujo esa hermosa playa en la que nunca me he bañado (hay que subsanar ese fallo inmediatamente9.
      Muchas gracias por tu comentario.

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  10. Buenos días Jane: he disfrutado muchísimo con tus dos últimos artículos, bueno como siempre, a pesar de que he estado hospitalizada, ayer me dieron el alta. Me he enterado que por mi corazón también pasan los años.
    Muchas gracias Jane.

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    1. A nuestras edades, cuando no duele una cosa, duele la otra. Me alegro de que ya te hayan dado el alta y que el corazón siga atendiendo a sus razones. Ánimo, querida amiga, y que no se diga que flaqueamos.
      Un abrazo grande y muchas gracias.

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  11. Qué feliz me haces amiga ..poder vivir este viaje con mis queridas amigas. Gracias, que sigas ilusionando y contando tus maravillas los lunes.

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    1. Siempre hay momentos malos, pero espero quedarme con lo positivo de la vida que es mucho (no les voy a estar contando que me intoxiqué con las biodraminas que me tomé para no marear en el viaje ¿no? :-D).
      Gracias por estar ahí y compartir vivencias. Sabes que te quiero.

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  12. Isabel Herrera López9 de octubre de 2018, 16:16

    Qué bonito relato de la visita! Comparto contigo esos momentos y la magia de alguno de ellos. Qué visión de Las Palmas desde la azotea del Ayuntamiento! Por fin, vi Los Riscos.
    Dos días intensos (quizá muy intensos) y vivificantes que nos muestran lo poco que conocemos lo cercano y que nos abre el deseo de conocer más de esta isla. Me faltó tanto! Ese Museo Sacro y las iglesias con sus retablos y sus putti! Qué afición tengo a la vejez, jaja
    Mi agradecimiento total a tod@s lo que lo hicieron posible, compañer@s y cicerones, por su trabajo, disposición, profesionalidad y pasión.
    Y no nos podemos olvidar de qué los mares procelosos se convirtieron en marmóleos (así dirían en tu isla natal) que nos permitieron olvidarnos de la biodramina.

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    1. Síiiií, el mar estaba como un plato, nos acompañó muy bien en la travesía. Nada de procelosos :-D
      Vete apuntando sitios para la próxima vez. Ya han dicho unos cuantos. Y a ver putti como locas (suena fatal)

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  13. Esther Casañas Morales9 de octubre de 2018, 22:07

    Precioso relato. Me quedé apenada porque no pude ir, después de leer tu escrito, más. Me queda el consuelo, de que al leerlo,es como si hubiese estado.

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    1. Echamos de menos a unos cuantos, Esther, pero esto es solo el principio. Ahora que hemos visto que es fácil y factible, no nos pararán y vendrás otras veces a sacar preciosas fotografías (que es otra forma de compartir).
      Gracias y un abrazo.

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  14. Carmen Paz Gutiérrez Arienza9 de octubre de 2018, 22:10

    Precioso relato del viaje Isabel, lo describes todo tan bonito que te sientes como si estuvieras allí.

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    1. Es que fue realmente bonito. Y sorprendente en muchos casos, y divertido, y entretenido. Para mí era una asignatura pendiente.
      Gracias, Carmen Paz. Un abrazo.

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  15. Qué hermosa es la isla de nuestros queridos vecinos. Qué simpática su particular forma de "hablá "y que ejemplo de unión tan grande. Es una isla de gran belleza y mucha cultura también. La casa de Colón recuerdo ahora o el impactante y colorido museo de Néstor.
    Todo ello sin contar su cómoda y transitada capital,que presume de esa ventana al Atlántico. Que cerca y que diferentes. PROVINCIAS con distintas señas de identidad,pero ambas bonitas como sus gentes.

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    1. Es curioso lo distintas que son nuestras islas. Como dice la canción, "bendita la Gran Canaria con el Nublo por bandera, dorada Fuerteventura, es Lanzarote costera. La Palma y Gomera, verdes, y el Hierro la legendaria, y el Teide por Tenerife ¡Bendita tierra canaria!". Todas tienen algo que las une y algo que las distingue. Son preciosas.
      Gracias por acercarte por aquí, Cande. Un abrazo.

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  16. Mira por donde..el Coro de Cámara Ainur, ganadores del Certamen Nacional de Música Coral 2018,en Burgos,son los del vídeo que subí que cantaron durante la comida.

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    1. Es que cantaban como los ángeles, Iris. Fue un privilegio oírlos al lado nuestro.

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  17. Tengo una pequeña duda en qué colegio de monjas estudiaste tú?? ?

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    1. En Las Dominicas de Santa Cruz. Era un bello edificio que estaba entonces en la calle Santa Rosalía y ocupaba hasta la calle San Vicente Ferrer.

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