lunes, 29 de mayo de 2023

Temas de conversación




Según un amigo de los que salimos a cenar los viernes por la noche, últimamente solo tenemos dos temas de conversación: las enfermedades y los nietos. Exagera, pero por curiosidad me puse a mirar si era verdad en los chats de grupos de esta semana y, oye, por lo menos las enfermedades son el pan nuestro de cada día.

El lunes y martes hablamos de visitas a médicos y fisioterapeutas. El miércoles el colesterol fue el tema estrella, que si el bueno, que si el malo, que si yo lo tengo perfecto, que si a mí me pasa de 300. Incluso una de mis amigas nos confesó que el colesterol me viene de mi madre y también la artritis. Mi padre, nada, ya se podía hinchar de chorizo, tocino y otras porquerías, y nada. El jueves tocó hablar de tratamientos y el viernes, de las defensas bajas y de los efectos de la vacuna del herpes. Parece que estamos en ese punto del que hablaba mi amigo Mingo cuando nos decía: "A ver si nos vemos un día de estos y nos tomamos un termalgín".

De todas formas, claro que se ha hablado de otro montón de cosas. Se ha organizado entre las amigas una comilona para la semana que viene (aunque sea mala para la dieta), se habló del ascenso de la Unión Deportiva Las Palmas, de los cohousing (tenemos a una amiga entusiasta), de las muertes de Tina Turner, Juan Galarza y Antonio Gala, de las elecciones, de que los años pesan... Y, por supuesto también hablamos de los nietos.

Esta semana, además, me han llegado historias con preguntas que ellos nos hacen a los abuelos. La del nieto de mi amiga Arista sobre por qué los pobres no van al cajero a sacar dinero, con lo fácil que es y así dejan de ser pobres. La de otra nieta que quería que sus padres, separados y con otras parejas, volvieran a estar juntos. Cuando su abuela le intentaba explicar que era complicado, la niña preguntaba: "¿Y por qué no buscan en Internet la solución?". Eso también pedía otra niña sobre el tema de si Dios existe o no: buscar en Google. O cuando en una charla que oí a un escritor argentino, este explicaba que le contó a su hija de 6 años que Hansel y Gretel se perdieron en el bosque y ella, lejos de asustarse, preguntaba: "¿Y por qué no llamaron a su papá por el móvil?".

Nosotros y las enfermedades, los niños y su curiosidad. Tal vez es lógico que estos sean, por contraste, nuestros temas favoritos de conversación. Nosotros ya hemos recorrido la mayor parte del camino y andamos medio averiados, ellos lo están estrenando todo en un camino tapizado de preguntas. Nos preocupan nuestros achaques y nos emocionan sus pasos nuevos. Nos fascinan porque los niños tienen todas las preguntas y la confianza en que se respondan. Y nosotros sabemos ya que hay muchas preguntas que nunca tendrán respuesta. He ahí la cuestión.

20 comentarios:

  1. Gracias, Isa, por tu animoooo y tu positivismo. Yo cada día con lo que tengo lo procuro.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tú eres un ejemplo, Nievitas. Lo difícil no es poner buena cara, sino ponerla en todos los momentos. Qué bueno tenerte cerca.
      Un abrazo grande.

      Eliminar
  2. ¡Y las que no tenemos nietos....de los perritos ! Jejejeje. Me has hecho sonreír y recordar...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, entre amigos con intereses comunes estos son los que salen en la conversación. No te digo nada cuando mi marido se enfrasca en una charla con otro palomero como él. Pueden estar horas sin cansarse.
      Gracias, Elvira, porque siempre conversamos cada lunes.

      Eliminar
  3. Bueno , son dos pilares en la vida El amor y la salud.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tienes razón, Maribel, son temas que tenemos cerca. Aunque a veces otros se imponen (la política, los hobbies, las ideas acerca de la vida, las anécdotas...). Y menos mal.

      Eliminar
  4. Charo Borges Velázquez29 de mayo de 2023, 15:13

    O de los sobrinos y ahijados, Elvira...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El caso es compartir, Chari. Y para muchos da igual el parentesco, lo que importa es la cercanía.

      Eliminar
  5. Verdad !! Enfermedades y hablando orgullosamente de nuestros nietos jejeje

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y ahora es un buen momento para compartir fotos: la Romería y el Día de Canarias y ellos vestidos de mago en los dos eventos, el final de curso y sus buenas notas, las primeras comuniones y ellos de protagonistas, las elecciones y (por lo menos en mi caso) mi nieta votando por primera vez... No nos cabe una pajita en el cuerpo.

      Eliminar
  6. Las enfermedades es un clásico, para gente de tu generación y para todo el mundo. Es que no se puede decir "qué dolor de cabeza tengo hoy por las tormentas" porque ya todos los demás empiezan a sacar su catálogo de males peores, mucho peores que el tuyo.
    Ala, yo también me voy a tomar un termalgín, que es la hora de la merienda. :D
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajaja, Esta semana en el catálogo de conversaciones se ha hablado hasta de colonoscopias, que es un tema romántico donde los haya. El "y yo más" es el lema que se impone. :-D
      Un abrazo, Dorotea.

      Eliminar
  7. Mi mujer y yo hemos llegado a un acuerdo con nuestro grupo más íntimo de amigos: Cuando alguien pregunta "¿cómo estás?", respondemos bien o mal sin más detalles. Antes, esa pregunta daba pie a por lo menos una hora de charla en la que todos exponíamos con morbosa precisión cada uno de nuestros múltiples males. Era deprimente. Creo que la vejez definitiva llega cuando nos desconectamos del mundo y nos limitamos a nuestro entorno más cercano (nietos, médicos, chismes familiares etc.). Yo no tengo nietos todavía; pero si algún día me veis conversando sobre mi maravillosos nietecitos... pegadme un tiro, por favor.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En el pueblo de mis ancestros, Los Sauces en La Palma, cuando alguien pregunta. "¿Cómo estás?", no responden ni bien ni mal, sino "regular". No sé por qué, pero el caso es que nadie sigue indagando y se conforman con esa respuesta. Siempre me ha parecido una costumbre muy sabia.
      Y lo de los nietos, no digas nada, porque he visto a gente con tu misma postura que luego te enseñaban hasta el primer diente que se les caía.
      Un abrazo, César, y a seguir tan joven.

      Eliminar
  8. ¡Hola Jane!
    Exacto. Justo ayer en el ratito en que nos reunimos unas cuantas amigas antes del pilates dije lo de hablar de las enfermedades, empezamos por el tiempo , y terminamos por la artrosis,, seguimos con la política y terminamos en la tensión
    Esto te lo empecé a escribir el lunes y se me pasó la semana, así corre el tiempo.
    En cuanto a hablar de los nietos soy muy consciente de que sölo nos interesa a los abuelos. Un día me encontré a una ex compañera y me contó muchísimas cosas de sus nietos en un rato. Cuando pensé que era mi turno me dijo "tengo mucha prisa", y se fue. A ver...
    Eso sí,cuando alguien me pregunta por mis nietos, le contesto: "tú lo has querido" y le suelto un par de gracias, no muchas ¡¡¡jajaja!!!
    Hasta pronto, Jane
    A la espera de tu próximo post. Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajaja, me recordaste a una amiga común que dice que, cuando se encuentra con alguien por la calle y empieza a enumerarle los males (o los nietos), ella la corta y le dice: "No me cuentes que te cuento". Tendríamos que estar así de avisadas ¿no?
      Un beso y gracias por estar siempre cerquita.

      Eliminar
    2. Eso de "tengo mucha prisa" es muy típico. Nos lo tenemos que aplicar más, antes de que esas personas nos suelten su rollo y luego nos dejen plantadas como si las culpables de su retraso fuéramos nosotras. PEro definitivamente me apunto el "No me cuentes que te cuento". XD

      Eliminar
    3. A mí me encanta el "no me cuentes que te cuento". Es una amenaza real y efectiva. Y a no ser que los dos interlocutores sean igual de alegadores, ahorra un montón de tiempo :-D.
      Un beso.

      Eliminar
  9. buenas tardes JANE!!!mi modesta opinión es que además de abuelos y abuelas existimos personas que deseariamos hablar de otras cosas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Todos deseamos hablar de otras cosas! Será por temas de conversación...

      Eliminar

google-site-verification: google27490d9e5d7a33cd.html